Viernes, 1º de mayo. 400 saharauis participaron en manifestaciones pacíficas en los barrios de Ksikisat, Oum Tounsi y Lebichat para protestar por la decisión del Consejo de Seguridad, que ha ignorado sus reivindicaciones y sus llamadas, y las de los gobiernos y las de asociaciones de derechos humanos, para ampliar las competencias de la MINURSO a la vigilancia de los derechos humanos.
Muchas banderas de la República Árabe Saharaui Democrática se hacían visibles en la manifestación, y los manifestantes pronunciaron asimismo eslóganes contra el pillaje de sus recursos naturales.
La policía y los soldados -vestidos de policías- marroquíes reprimieron violentamente la manifestación, golpeando a mujeres y hombres. Cinco manifestantes fueron conducidos a la prefectura de policía, interrogados y puestos en libertad al día siguiente.
Sábado, 2 de mayo, a las 14h. Más de diez vehículos de la policía marroquí rodearon la casa de Atikou Barai, situada en el barrio de El Ghofran. La policía tiró la puerta abajo y entró en la casa por la fuerza. Detuvieron al activista saharaui, que había sido puesto en libertad hacía cuatro meses tras cuatro años de cárcel por su participación en las manifestaciones pacíficas de Dajla en 2011.
Según nuestro corresponsal en Dajla, cuatro otros activistas saharauis fueron detenidos en la calle en diferentes barrios de la ciudad. Se trata de Mohamed Salem Sidi, Mansour Sbaai, Wanati Rbani y Sid Ahmed Bairouk.
Unos 55 manifestantes protestaron durante media hora ante la prefectura contra estas detenciones antes de ser dispersados violentamente por la policía marroquí. A la publicación de esta información, los activistas siguen detenidos.