De acuerdo con el estudio ‘Uso problemático del móvil y diferencias de género en Formación Profesional’ que han realizado de manera conjunta UPNA, la Universidad de Girona y la Universidad Ramon Llull, un 30% del alumnado de FP de Nafarroa presenta un patrón de riesgo respecto al uso del móvil y otro 7,9% hace un uso problemático del aparato electrónico.
Txon Vega, una de las expertas que ha participado en la investigación, ha matizado qué significa exactamente hacer un «uso problemático»: «Hablamos de uso problemático del móvil cuando las personas invierten más tiempo utilizándolo del que quisieran; cuando quieren parar, pero no lo hacen, y sienten cierta pérdida de control en el uso. Y, además, todo ello tiene consecuencias negativas en su vida porque desatienden actividades académicas, familiares, de ocio no virtual… ».
En el estudio, Marta Beranuy, Vega y Begoña Haro, psicólogas e investigadoras del Departamento de Ciencias de la Salud de la UPNA; Fran Calvo, de la Universidad de Girona; y Xabier Carbonell, de la Universidad Ramón Llull han analizado los hábitos de consumo de 1.107 estudiantes de Formación Profesional de Nafarroa, con una edad media de 18.8 años.
«La mayoría de estudios realizados en España y en otros países se han centrado en estudiantes universitarios, de educación secundaria y de Bachillerato, pero la investigación en Formación Profesional es dispersa e insuficiente», ha explicado Beranuy.
Según los resultados obtenidos, el 7,9% de la muestra hacía un uso problemático del móvil y el 28,6% un uso con problemas ocasionales, por lo que el equipo de esta investigación ha hecho hincapié en la necesidad de fomentar el uso adecuado de las tecnologías en el alumnado de FP, «prestando especial consideración a las diferencias de género encontradas».
Uso condicionado por el género
El 92,5% de los participantes usaba el móvil para servicios de mensajería, un 87% para redes sociales y un 78,5% para escuchar música. Sin embargo, se han detectado diferencias de género para la mayoría de usos del móvil.
Según la investigación, las mujeres utilizan más servicios como llamadas, mensajería, redes sociales, música, actividades académicas, edición de documentos, ocio, mapas y navegación, salud y calendario, mientras que los hombres hacen uso del smartphone para buscar información, jugar a videojuegos, a juegos de azar en línea, hacer apuestas deportivas y ver pornografía.
Por otro lado, un 87,1% de los participantes usaban el móvil en el centro de enseñanza, con mayor uso por parte de las mujeres. Estas presentaron un mayor uso problemático del móvil, así como mayores problemas relacionados con el uso emocional y comunicacional del móvil.