Leticia Orue
TENDENCIAS

Südseite

Al igual que muchas otras ferias internacionales de diseño, la Semana del Diseño de Estocolmo se ha visto obligada a digitalizar parte de sus eventos. Echando un vistazo a Greenhouse, la plataforma para estudiantes y jóvenes diseñadores nos llamó mucho la atención el trabajo de Carlotta Simon, Südseite. Con una sencilla combinación de leds y textiles, Simon consigue mejorar un aspecto fundamental en nuestros hogares: el tipo de luz que recibimos a través de las ventanas. Como sabéis, las casas orientadas al norte solo reciben luz solar por la mañana y por la noche. En las casas orientadas al este, el sol incide desde la mañana hasta el mediodía. La orientación oeste te permite gozar de iluminación natural desde el mediodía hasta que se ponga el sol, lo que significa que la luz solar que impacte en tu casa lo hará durante las horas de más calor. Es decir, por la tarde. Las casas orientadas al sur reciben luz solar la mayor parte del día. Tu piso estará iluminado de forma natural durante las estaciones de otoño, invierno y primavera y será en verano cuando la vivienda acapara luz solo durante las horas centrales del día. Para evitar esas ventanas tristes y penumbrosas que convierten la habitaciones en cuevitas, la diseñadora Carlotta Simon, estudiante de la Escuela de Arte y Diseño Weißensee de Berlín, ha creado una luminaria que combinando tiras de led con un panel de vellón translúcido, detecta los niveles de luz de una ventana y la complementa. El objetivo es hacer que una ventana orientada al norte, este u oeste ofrezca la misma calidad de luz que una orientada al sur. ¿Qué os parece? ¿Tenéis alguna habitación en vuestra casa a la que le vendría bien algo así? www.greenhousedesign.se

 

Gubi

Si te gusta el diseño danés y te apasionan los clásicos, te recomendamos que eches un vistazo a la nueva colección de Gubi, una firma de diseño danesa, conocida por sus colecciones atrevidas y elegantes. Fundada en 1967, el año en que nació el actual propietario y director creativo, Jacob Gubi, la compañía colabora con diseñadores y archivos de gran prestigio, además de talentos emergentes contemporáneos. Sus propuestas evocan emociones y cuentan historias, lo que hace que las piezas sean atemporales y duraderas. Así, Gubi reúne los iconos olvidados del pasado con los clásicos del mañana en una colección visionaria. Por ejemplo, ha reeditado la lámpara colgante Multi-Lite de Louis Weisdorf en latón negro. La adición de este nuevo acabado aporta una hermosa profundidad y realza los detalles de la lámpara clásica, dando a la colección una nueva estética lujosa y antigua. Por si no la conocéis, la colección fue creada en 1972 por Louis Weisdorf. Un anillo de metal, dos cilindros concéntricos y un par de pantallas giratorias en forma de cuarto de esfera dan forma a esta lámpara personalizable en la que simplemente ajustando las pantallas se transforma la luz, permitiendo dirigirla hacia arriba, hacia abajo o incluso en haces asimétricos. Algo muy común ahora, pero revolucionario en su tiempo. Imprescindible si te gustan los clásicos. www.gubi.com

 

Kenn

Ahora que tod*s somos expertos en bizcochos, pan y nos hemos reencontrado con la cocina (es lo que tienen las pandemias), os habréis dado cuenta de la cantidad de “cacharros”, no necesariamente bonitos, que se necesitan si te has puesto en modo Masterchef. Kenn, de Joseph Burrell, es un procesador de alimentos que se adapta al entorno hogareño moderno. Diseñado específicamente para una generación joven, su estética minimalista está inspirada en obras de arte, cerámicas y formas suaves y el resultado es una pieza que parece de todo, menos un robot de cocina. Otro plus es la base de carga inalámbrica, porque claro… necesitamos nuestros teléfonos para ver las recetas, oír música, hablar mientras hacemos un buen fondo… Estaremos atentas, parece que vienen transformaciones en el universo aparatos de cocina. @JosephBurrell

 

Tal

Radical pero sutil. Así define el diseñador francés Léonard Kadid la silla flat, creada para la marca de muebles parisina Kann Design. El asiento de Tal, que se presenta en roble teñido de negro o verde y madera de fresno claro, está sostenido por debajo por una fina estructura metálica. Aparte de aumentar la estabilidad del diseño, la estructura permite conectar sus diferentes elementos estructurales en un todo funcional. «Los perfiles de aluminio en T refuerzan el asiento de madera contrachapada y permiten que las patas de madera maciza queden fijadas. Este principio estructural define toda su geometría dando una presencia radical pero sutil». www.leonardkadid.com

 

Champizapa

No es la primera vez que hablamos de las posibilidades de los micelios como material apto para todo tipo de productos. Como sabéis, el micelio es uno de los sistemas vivos que más abundan en el planeta; es un tejido compuesto por microfibras similares a hilos que forman parte de las raíces de los hongos, crecen debajo de la tierra y dependiendo de las condiciones ambientales, como la humedad o temperatura, puede ser de crecimiento rápido. La diseñadora alemana Emilie Burfeind ha desarrollado una zapatilla tipo calcetín con una suela de micelio en forma de hongo y una parte superior tejida de pelo canino. Sneature (o champizapa, como le hemos bautizado) consta de solo tres materiales renovables de base biológica, lo que permite desmontarlo, reciclarlo y convertirlo en abono industrial al final de su vida útil. Las zapatillas no tienen cordones y básicamente son calcetín sin costuras, hechas de pelo de perro. Este pelo se hila para conseguir una fibra de alta calidad conocido como Chiengora, que retiene el calor un 42% mejor que la lana de oveja y que históricamente fue utilizado por las sociedades indígenas en la costa oeste de Estados Unidos. El tejido se puede manipular para que sea más suave o firme en algunas áreas, más transpirable o más elástico en otras. Una vez tejido, se sumerge en caucho natural líquido para crear un guardabarros repelente al agua a lo largo de la suela. El micelio se mezcla con un sustrato de celulosa hecho de cáñamo y otros productos de desecho agrícola y se cultiva en un molde para crear la suela exterior e interior. Estos se entrelazan como ladrillos de lego, con perforaciones en la parte inferior del tejido que ayudan a mantenerlos juntos y estabilizar el zapato. ¿Os la pondríais? www.emil-blau.com