GOTZON URIBE
MÚSICA

Jake Xerxes Fussell

Uno de los momentos más llamativos y extrañamente conmovedores del hermoso “Good and Green Again” –el nuevo y cuarto disco del cantautor norteamericano Jake Xerxes y un álbum repleto de momentos deslumbrantes–, es la canción “Washington”. Muestra un silencioso pasaje introductorio en el que su guitarra Telecaster conversa con delicadeza con el piano del músico James Elkington. Su escucha se siente como el final de una película.

La canción proporciona una metáfora adecuada para el disco en su conjunto y para el proceso artístico de Fussell en sí. Fussell se ha distinguido como uno de los intérpretes preeminentes de su generación de cantantes de folk, una práctica que aborda con una refrescante falta de nostalgia y preciosismo. Al recontextualizar antiguas canciones del sur de Estados Unidos, les permite respirar y hablar por sí mismas, alternativamente, las habita y les deja habitar en él. Sus hipnotizantes actuaciones revelan la belleza de llamar a las cosas por su verdadero nombre, de hacer pasar suavemente los textos y las grabaciones antiguas por el telescopio del tiempo.

Esta vez James Elkington ha producido y tocado diferentes instrumentos, aportando a las canciones de Jake su propio e inigualable sentido de la armonía y la orquestación, el equilibrio y la tensión dramática, perfeccionado a partir de colaboraciones con artistas como Michael Chapman, Steve Gunn, Joan Shelley, Richard Thompson y Jeff Tweedy.

La pareja reclutó a un grupo de formidables músicos procedentes de Durham, Carolina del Norte (donde vive Fussell) y de otros lugares, incluyendo a los miembros habituales de la banda Casey Toll (Mt. Moriah, Nathan Bowles) en el contrabajo, Libby Rodenbough (Mipso) en las cuerdas y Nathan Golub en el pedal steel. A ellos se unieron los recién llegados Joe Westerlund (Megafaun, Califone) a la batería, Joseph Decosimo al violín, Anna Jacobson a los metales y el veterano colaborador y fan declarado de Fussell Bonnie “Prince” Billy, que contribuye con voces adicionales.

Juntos, este equipo es increíblemente capaz de señalar ese lugar mágico en el mapa musical de Jake, donde la melancolía, la quietud y la alegría que mueve la cabeza y los pies se mezclan y trascienden. Un buen ejemplo es el tour de force de nueve minutos de “The Golden Willow Tree”, la única canción explícitamente narrativa, es una interpretación hipnótica y minimalista de una trágica balada marítima sobre el hundimiento de un barco enemigo a cambio de riqueza y gloria, y la inevitable traición del capitán.

Escuchar a Jake Xerxes Fussell es un viaje por la música folk sin pretensiones. Él y sus colaboradores evocan un tiempo y un lugar que quizá no hayan existido, pero que invitan a ello igualmente.

CD AIPAGARRIA

 

Jeremy Ivey

“Invisible Pictures” • Anti, 2022 • Rock

“Invisible Pictures”, el tercer álbum de Ivey para Anti- Records, es una revelación, ya que combina la crudeza de las reflexiones personales con melodías alegres y una producción rica y caleidoscópica. Aunque las canciones están arraigadas en un remolino de caos e incertidumbre que reina en estos tiempos, el disco es, en su esencia, una colección de canciones positivas, que se niega a rendirse al dolor existencial que capta con tanto arte. El movimiento perpetuo, las melodías intrincadas y los arreglos extensos son una constante. Un álbum apasionado y trascendente que recuerda más a John Lennon o Elliott Smith que a cualquier cosa que salga de la ciudad de Nashville en la actualidad.