Shelly-Ann Fraser-Pryce confirmó que está en el buen camino para defender sus títulos dentro de tres semanas en los Mundiales de Beijing. La jamaicana ganó de calle los 100 metros que cerraron la reunión de Estocolmo con 10.93, en condiciones meteorológicas desfavorables con 15°C, un 82 % de humedad y viento en contra de -0,2 m/s en el estadio olímpico que probablemente contrastarán con el calor que reinará en el Nido.

La caribeña de peinado floreado y sonrisa permanente fue la única que bajó de los 11 segundos, haciendo gala de su estupenda salida y desbancando a la campeona estadounidense Tori Bowie, segunda con 11.05, mientras otra jamaicana Natasha Morrison se situaba tercera (11.22).

La 12ª reunión de la Diamond League resultó agradecida para algunas de las pocas estrellas pero muy decepcionante para otras. Feliz terminó la colombiana Caterine Ibargüen, campeona mundial y subcampeona olímpica de triple salto, y ejemplo de regularidad donde los haya puesto que lleva casi tres años imbatida. Ayer sumó su 28ª victoria consecutiva con una marca de 14,69 metros, y además por delante de la campeona olímpica, la kazaja Olga Rypakova, la última que le ganó en los Juegos de Londres’2012.

A Orlando Ortega le fue genial en los 110 m. vallas que se adjudicó en 13.18, por delante del Shubenkov, campeón europeo (13.22) y del estadounidense Oliver, campeón mundial (13.24). Ortega, líder del año, se perderá el Mundial de Beijing porque acaba de cambiar la nacionalidad cubana por la española. Entre los decepcionados nadie como el saltador de altura Barshim. Al frente del ranking todo el verano gracias a sus 2,41 metros del 31 de mayo, el qatarí no levanta cabeza. Terminó segundo con 2,29 y continúa acumulando derrotas ante rivales de menor potencial. Hasta el próximo 3 de setiembre en Zúrich no habrá Diamond League.