Navascués disfruta de la mínima el día después
Estela Navascués, que el domingo logró el billete para participar en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en la prueba de maratón, disfruta del momento «emocionada y supercontenta» con lo que acaba de conseguir.
La maratoniana navarra, afincada en Soria donde se entrena con el que fuera doble campeón del mundo Abel Antón, completó los 42,195 kilómetros en 2 horas, 32 minutos y 49 segundos, con 11 segundos de margen sobre la mínima requerida: «Me hubiera conformado con 2h:32.59. Once segundos es suficiente para estar dentro».
La tudelana opina que participar en unos Juegos «es el premio que a cualquier deportista le gustaría conseguir. Solo pueden estar los mejores de cada prueba. Debo valorarlo y qué mejor que en una distancia mítica como el maratón», apuntó.
Navascués admite que iba a Sevilla con una preparación parecida a cuando se quedó a 51 segundos de conseguirlo en Fráncfort, pero precisó que la diferencia ayer fue el ritmo constante de Asier Cuevas como liebre, el subcampeón mundial de ultrafondo que sabe de esto.
«Asier me llevó a un ritmo perfecto desde el principio hasta el final», dijo la tudelana sobre el eibartarra, quién añadió que todo «salió rodado» en la capital andaluza.
Está muy agradecida por las felicitaciones recibidas. Ahora, después del duro plan de entrenamientos y alimentación de los últimos meses se tomará un periodo de «relax y descanso mental».