GARA
IRUÑEA

Banco de ADN en Nafarroa para identificar a desaparecidos en 1936

El Gobierno navarro pondrá en marcha un banco de ADN con el objetivo de identificar al millar de personas que todavía están desaparecidas tras ser fusiladas en 1936 en Nafarroa. Ana Ollo, consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales, subrayó que esta medida está recogida en la Ley Foral de Memoria Histórica.

El Gobierno navarro va a poner en marcha un banco de ADN que permita la identificación de los cuerpos que se vayan recuperando en las actuaciones previstas en el programa de exhumaciones de víctimas de 1936 y de la represión franquista.

Así lo anunció ayer la consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales, Ana Ollo, quien señaló que el Ejecutivo navarro «entiende absolutamente necesario trabajar en la recuperación de una memoria democrática, una memoria basada en la búsqueda de la verdad, la justicia y la reparación de quienes fueron víctimas de una violencia injustificada». Asimismo, Ollo anunció que el lunes comenzarán los trabajos para retirar el símbolo franquista de la Cruz Laureada de San Fernando de la fachada de Diputación.

La consejera precisó que la puesta en marcha del banco de ADN es una medida que está recogida en la Ley Foral de Memoria Histórica. Al respecto, indicó que debido a la avanzada edad de los hijos de los desaparecidos, la labor de identificación de los restos exhumadas cobra una especial urgencia.

Un acto de reparación

«Este banco de ADN es un acto de reparación, de ayuda y apoyo a esos familiares de esos desaparecidos todavía sin encontrar», remarcó Ollo.

Por su parte, el director general de Paz, Convivencia y Derechos Humanos, Álvaro Baraibar, detalló que ese banco está dirigido fundamentalmente a la toma de muestras de ADN a los descendientes directos, hijos e hijas, de los desaparecidos de 1936. Baraibar precisó que existen alrededor de mil personas que siguen desaparecidas desde la sublevación fascista y avanzó que será la empresa pública Nasertic la encargada del proceso, para el que se ha destinado una partida de 8.000 euros para este ejercicio.

Además, apuntó que Nasertic desarrollará una base de datos en la que se conservará la autorización de la persona e informaciones de tomas de muestras personalizadas. El director general explicó asimismo que los muestras que se tomarán a los familiares de los desaparecidos se tienen que conservar en oscuridad y tienen una vida reducida, por lo que en un periodo de tres a cuatro años se debe proceder a la extracción del ADN.

La extracción del ADN, dijo Baraibar, garantiza el uso y la posibilidad de identificación de una persona a lo largo de unos quince años. En una tercera fase se digitalizará la información de la secuencia del ADN, por lo que esos datos se almacenarán indefinidamente.

En relación a los trabajos de retiro de la Cruz Laureada, comentó que «responden a un mandato legal» y que cumplen el programa de retirada de simbología franquista, «cuyo objetivo es la democratización del espacio público».

La intervención tendrá lugar pasado mañana y en la operación se instalarán paneles informativos en los que se explicará la diferencia entre historia y memoria, qué marca la ley, en qué consiste la intervención y el contexto histórico.

homenaje a los muertos en la prisión de azpeitia

Coincidiendo con el 80 aniversario de la entrada de las tropas fascistas en Azpeitia, el Ayuntamiento de esta localidad homenajeó ayer a los siete presos republicanos que murieron en la cárcel situada en el edificio que hoy ocupa el ambulatorio. Se trata de Juan Casado, Francisco Delfa, Francisca Gálvez, Luis Palomino, Juan Morales, Eusebia Delgado y Manuel Martín. La mayoría de ellos eran andaluces. Todos ellos fallecieron como consecuencia de problemas de salud originados por las malas condiciones de la cárcel de Azpeitia. Familiares de los presos de 1936 participaron en el acto de ayer, organizado por el Ayuntamiento y Aranzadi.

Gorka RUBIO | ARGAZKI PRESS