Pablo Urtasun (Urdiain, 1980) debuta este año como director tras colgar la bicicleta y ha buscado un buen calendario y la infraestructura para la llegada a Europa del Ukyo, un continental japonés que quiere crecer con dos vascos en sus filas, Egoitz Fernández y Jon Aberasturi.

Urtasun corrió en el Ukyo en 2015 y ya le propusieron ser director, pero prefirió buscar con el Funvic un calendario más europeo que no le alejara tanto de la familia. Ese deseo no se cumplió, pero lo ha logrado este año: «Me han pasado el programa y haré todo el calendario europeo y en Japón solo estaré veinte días con el Tour de Japón y de Kumano. No tiene nada que ver con los tres meses que pasaba allí como ciclista. Quería seguir ligado al ciclismo, era una puerta que dejé abierta, me dijeron que el día que quisieran venir a Europa les gustaría tenerme y en agosto contactaron conmigo y he intentado negociar el calendario y la infraestructura».

Explica que «es una responsabilidad diferente. Cuando eres ciclista te preocupas de estar bien y todo depende del trabajo que haces. Ahora dependes de otras personas, de muchas llamadas y emails. Es un trabajo de oficina para que las cosas salgan. Casi todas las carreras a las que solicitamos invitación nos la han dado. Una empresa vasca como Eusko Auto-Toyota apoya el proyecto con vehículos y es de agradecer. Hemos alquilado la autocaravana de la Fundación Euskadi y un camión para el material que utilizó mi anterior equipo, Funvic. Ahora falta que lleguen los coches, rotularlos, poner las bacas y confirmar vuelos y hoteles. Todo está encarrilado, pero queda trabajo».

Debut en Valencia

Debutará en la Vuelta a Valencia del 1 al 5 de febrero y además ha asegurado Zornotza, Castilla León, Asturias, Ordizia y Getxo y espera la confirmación de Lizarra, Rioja, Madrid y Trofeo Agostinho. Urtasun explica que «el equipo tiene dos vascos y cuatro españoles y la idea es combinar el equipo, que haya cuatro de aquí y cuatro japoneses en cada carrera. Que los japoneses vengan y los de aquí vayan allí. Este es un proyecto ilusionante con vistas a crecer. El siguiente objetivo es dar el salto a profesional y ser el primer japonés en esta categoría, porque el Nippo Fantini es más italiano. Pero tampoco les obsesiona el salto. Quieren ver en el ciclismo europeo hasta dónde pueden llegar. Hacen un esfuerzo enorme para un continental, con dos infraestructuras en Europa y Asia».

De su mano ha dado el salto a profesionales Egoitz Fernández: «Es un corredor que puede dar grandes resultados y vamos a darle todo el calendario que podamos para que se acople bien y pueda progresar. Miguel me dio la oportunidad de correr las mejores carreras y me alegra haber podido hacer un hueco a un corredor de la Fundación que se merecía la oportunidad. Se la ha ganado a pulso en la carretera».

Además seguirá Jon Aberasturi, el vasco con más victorias en 2016, seis en Japón: «Si ganas en Asia nadie se acuerda de ti, pero si lo acompañas de buenos resultados en Europa se valoran más. No poder comparar tu nivel en Europa hace que ganar allí parezca fácil. Si gana aquí o se mete en llegadas masivas y logra puestos se valorará más. En Valencia habrá dos llegadas al sprint, también en Rioja, Asturias, Castilla León... Tendrá carreras para ver su nivel real».

«Si no lo hubiera intentado me habría quedado la duda»

Pablo Urtasun pone fin a una carrera que comenzó en profesionales en 2003 con el CSC como stagiere. El salto definitivo lo dio en Kaiku (2005-06) para seguir con Liberty en Portugal (2007-08), Euskaltel (2009-13), Ukyo (2015) y Funvic (2016), donde no tuvo el adiós ideal: «Empecé muy ilusionado con un invierno muy bueno y la idea era hacer un calendario como el que tendrá el Ukyo, pero empecé en Murcia al perderme Andalucía con una fuerte bronquitis que estuve a punto de ingresar. No se cumplió el calendario, solo he tenido 21 días de competición, tres vueltas. Tras Langkawi y Turquía estuve tres meses sin competir. Fui a Portugal y lo fácil era bajarme el tercer día, porque no tenía nivel para disputar, pero no me he retirado en ninguna carrera. Siempre he necesitado correr mucho, cuanto más mejor, y con 36 años la falta de ritmo la he notado mucho».

No se arrepiente de no haber dejado el ciclismo en 2013 con el podio de la Vuelta por equipos de Euskaltel: «Miro atrás y en once años de profesional logré diez victorias y muchos puestos entre los cinco y hago un balance positivo. Esperaba que saliera un equipo vasco, salió Murias y algo es algo, pero el ciclismo no ha mejorado y me quedo con la conciencia tranquila porque en 2013 estaba en mi mejor momento. Estos tres años no son la mejor despedida, pero si no lo hubiera intentado me habría quedado la duda toda la vida». J.I