En media hora, unos 25 activistas de Bizi empapelaron ayer la agencia de BNP Paribas en el centro de Donibane Lohizune. La recubrieron totalmente con 468 carteles, el mismo número de sociedades offshore que, según revelaron los denominados Papeles de Panamá, fueron creadas por esta entidad bancaria para facilitar la evasión fiscal.

Esta fue su manera de «celebrar» el primer aniversario de la filtración de los documentos confidenciales del gabinete de abogados panameño Monseck Fonseca y de unirse a las diferentes iniciativas que están teniendo lugar en el marco de la semana internacional contra los paraísos fiscales.

El colectivo altermundialista y ecologista vasco subrayó que, «justo un año después de las revelaciones, los principales actores del sistema de evasión fiscal organizado siguen impunes. BNP continúa siendo el campeón de los bancos franceses con 2.432 millones de euros de beneficios gracias a sus filiales offshore».

Fraude «organizado»

Jon Palais, portavoz de Bizi, recordó ante la agencia lohizundarra el «vínculo existente entre las prácticas de fraude fiscal organizado y la crisis social y ecológica cada vez más grave».

Es por ello que también se han adherido al llamamiento de la Fundación Nicolas Hulot (conocido ecologista francés) y Emmaus que apela a luchar «contra las desigualdades en todas sus formas, contra el fraude y la evasión fiscal, y contra la impunidad de bancos, políticos y multinacionales».

De hecho, Bizi fue una de las 150 organizaciones firmantes del manifiesto “Nous accusons” que denunciaron el papel que BNP juega «en la evasión fiscal, la financiación de energías fósiles y en el apoyo a empresas responsables de vulneraciones de derechos humanos».

La acción de ayer sirvió, asimismo, para solidarizarse con Florent Compain, presidente de Amis de la Terre, que será juzgado el próximo 11 de abril en Bar-le-Duc tras ser demandado por BNP-Paribas, que le acusa de haber participado a una «confiscación ciudadana de sillas» en 2015. Se trata de un tipo de acción creada por Bizi que fue emulada en numerosas ciudades francesas, en especial en los prolegómenos de la COP21 que se celebró en París ese año.