El swing, el ritmo y blues, el western swing, el jazz manouche... son estilos que, dentro de sus matices, están calando cada vez más en la escena vasca. Cabe entender que el estado actual de la música es la suma de todos los periodos vividos. Al no ser EH una potencia musical, tocó imitar lo que se escuchaba o creaba en los focos calientes de cada época: EEUU, Gran Bretaña, Alemania, Estado francés... Pero no todo era tuneable ni le correspondía su turno. Pasado (dentro de que todo está vigente en sus células eternas) el punk, el pop, el metal, la sicodelia, el rock en general... toca rebuscar en los cajones del tiempo e investigar con detenimiento en periodos concretos.

Es el caso de Dr. Maha’s Miracle Tonic que enfocan su cámara hacia los cuarenta/cincuenta, y lo es asimismo con la banda invitada al concierto del sábado (22.00) en Kafe Antzokia, Ghost Number & his Tipsy Gypsies, que vigilan los años veinte. Y no son los únicos retro-vigentes, ya que mientras una mayoría se despendola con los sonidos más accesible en una primera escucha, una minoría dinámica y amplia investiga y levanta losas en busca de un pasado instructivo, repleto de sonoridades merecedoras de una revitalización.

“Bank robbers” es un disco de música ligera entretenida y seria, sin incompatibilidades, y liderado por once canciones. Existen las preferidas –en una escucha global siempre sonará dos veces “The wind”–, pero la calidad es tan homogénea que el bloque toma el mando.

De otra parte, que nadie se asuste por la palabreja jazz. “Bank robbers” encuentra acomodo en el hot jazz, pero el country, el vodevil, la pura balada con toque crooner, el gospel, el doo wop... van tiñendo cada canción hasta dejarla lista para una escucha sin traumas. Momentos para la calentura y la tristeza, que alguna canción es pura y delicada magia emocional.

Todo posible por el enorme trabajo realizado desde su primer álbum, y por la calidad electro-acústica de Patxi López Monasterio, Daniel González Álvarez, David Sánchez Damián, Sergio Llanos Barajas y el violín de Nerea Alberdi Etxebarria. Músicos, más invitados, que han grabado uno de los discos más persuasivos de los últimos años.

En 2011 quedan segundos en el concurso Villa de Bilbao. Dos años después consiguen un curioso premio: ganan un concurso planteado por «El País» al presentar la mejor versión sobre un tema de los Beatles. Posiblemente premios no esperados y carga de emoticones.

Lo del Villa llegó en un momento de cambio y sirvió para darnos un empujón. Hacíamos una música menos común en ese momento en Bilbao, y no sabíamos si funcionaría. Ahora sí se puede hablar de una escena. El concurso d “El País” apareció en el momento justo, porque acabábamos de participar en el ciclo Izar&Star con una revisión del álbum “Magical Mystery Tour” de los Beatles. Hablamos con TwoBaskos y grabamos el vídeo para el concurso en un periquete.

En la mitad de 2012 debutan con «Dr. Maha´s Miracle Tonic», dejando atrás el proyecto Maha. El nuevo inicio aporta un sonido más relajado del que cabía esperar. Canciones como «Love in outer space», «El mambo de los muertos», «The corner»... tienen más de bálsamo que de bebida excitante y de un cambio inesperado.

Ese álbum supuso un giro hacia sonidos más acústicos. Veníamos de hacer garage/rock con instrumentos eléctricos y encontramos otro camino. Sin duda los cambios en la formación también influyeron mucho. En general, se puede decir que hemos ido hacia atrás en los gustos musicales y eso se ha reflejado en nuestras canciones Y, efectivamente, las baladas y los temas melódicos ganaron protagonismo. Temas en general más reflexivos y trabajados desde el punto de vista compositivo. Canciones que se pueden escuchar muchas veces y descubrir nuevos matices.

Cuatro años más tarde este tipo de canción tan de mesa y luz tenue no se ha perdido, de alguna manera demuestra que la media luz es parte de la personalidad del grupo. «She stole my bike but i love her», «Those wonderful days», «Dreaming of you» o «The wind» recuerdan a melodías para viejos musicales o películas de dibujos animados con pasajes románticos, delicados...

Mientras que en los directos si buscamos los cortes más frenéticos y festivos, esos temas de luz tenue y sin prisa funcionan muy bien en disco. El hecho de evocar imágenes de  tiempos pasados es algo buscado. Me atrae personalmente la idea de componer canciones que parezca que siempre han existido, que ya estaban ahí, pero son nuevas y se alejan de clichés. Cuando alguien te pregunta: ‘¿De quién es esa canción del disco?’, y es nuestra, siento que lo hemos conseguido.

«The wind» es especialmente hermosa, pudiera ser folk o una canción cercana al country más baladístico. El contraste es la cantidad de música negra que les acompaña en otras canciones.

Estamos muy influenciados por la música negra. Blues, swing, jive, gospel, doo wop,  rhythm & blues... Hay tanto y tan bueno. Pero también nos apasionan el bluegrass, el western swing, el hot jazz, el jazz manouche, el son cubano... ¡Joder!, es que me vengo arriba solo de pensar en todo este batiburrillo. “The wind” es una canción quizá más profunda que otras del disco. Sencilla, pero llena de contenido. En cuanto al significado, prefiero dejarlo en manos del oyente.

Vocalmente es un disco muy sereno, con el contrapunto de canciones dinámica. Hasta en canciones tan dinámicas como «Dr’s band» mantiene su serenidad, su zarpazo de guaté, casi en clave crooner

Normalmente en directo todo resulta más frenético y agresivo, pero el disco es distinto, tiene más de esa serenidad. Lo cierto es que ahora, con la perspectiva del tiempo, creo que hemos acertado.

El cabaret y el swing nos situaría por EEUU, Alemania, el Europa central, la del Este, por Broadway y/o París, con Cole Porter... ¡Podría haber hasta algún zíngaro en el grupo! ¿por qué les seduce esta época y su entorno?

Jajaja. No, no hay familiares zíngaros, quizá en vidas pasadas... Pero mira, sí hay un musical que ha sido inspiradora, se titula “El inspector general”. En ella el Dr. Yakov vende su tónico milagroso de pueblo en pueblo... Números musicales absurdos, enredos y una gran actuación de Danny Kaye. Y por supuesto hemos escuchado mucho el programa de radio “Melodías Pizarras”.

Donde más se meten en el papel de la representación quizá sea en la genial «La feria siniestra«, aquí traspasan la musicalidad para convertiros en actores.

Realmente es una canción más meditada de lo que parece, y surge desde la temática. Imagina feriantes y freaks que viajan en carromatos de pueblo en pueblo. Y del otro lado, el miedo a los que vienen de fuera, las habladurías, los rumores y las sospechas... Un buen caldo para una historia. Además en este tema contamos con la inestimable colaboración del gran Santi Delgado (Runaway Lovers)

La teatralidad sigue con «Dreaming of you» otra maravilla que coloca la canción al lado de un cuento de hadas, unos dibujos animados amorosos, el viejo cine... el cabaret.

La idea era hacer una canción pegadiza, y pensamos que un bostezo es lo más pegadizo que hay. De hecho, todavía cuando la escucho no puedo evitar bostezar... Pero de esta idea tan sumamente estúpida, surgió una canción  muy evocadora. Ahora es de mis preferidas del disco.

Han realizado el esfuerzo de publicar en cedé y vinilo.

Está claro que se venden menos discos, los formatos cambian, y ahora toca el streaming. En el vídeo ha habido una evolución exponencial hacia una mayor resolución, pero en el audio nos conformamos con el mp3. Curioso. Nuestros dos discos están a punto de agotarse. La ecuación es sencilla: si tocamos en directo vendemos discos.