V.E.
MIL COSAS QUE HARÍA POR TI

Mi reino amoroso por un reloj de lujo

La vida de Dani es perfecta. Es jefe de un negocio que funciona a las mil maravillas, tiene amigos que le ayudan en lo que haga falta y su vida amorosa es la que cualquier romántico cursilón desearía. Su novia es lista, guapa, divertida y atenta. Para muestra (material) de su amor hacia él, un reloj de lujo. Una joya de la corona que mejor no preguntar cuánto ha costado... y mejor aún no perder. Pues bien, esto último ha hecho el desgraciado de Dani. Un despiste, un descuido, un desliz que, visto en perspectiva, puede ser el desencadenante para que su idílico reino se desplome cual castillo de naipes.

Dídac Cervera, uno de los niños prodigio de la escuela ESCAC, hace su debut en el largo (y en solitario) con “Mil cosas que haría por ti”, comedia romántico-gamberra que conjuga dos tareas igualmente peligrosas: reconquistar al amor de tu vida y derrotar a una organización mafiosa. Cocktail sin lugar a dudas explosivo, el cual, en manos equivocadas, puede acabar lastimando tanto al espectador como a quien lo está manipulando. Para evitar la catástrofe, Cervera se rodea de un reparto de caras conocidas tanto del panorama televisivo español como, sobre todo, del catalán. Una horda de caras lo suficientemente simpáticas como para que el producto quede marcado precisamente por esta virtud.