V.E.
DÍA DE PATRIOTAS

Un día de patriotas cualquiera

El 15 de abril de 2013, la ciudad de Boston se despertó con los nervios que presiden cualquier día marcado en el calendario. El agente de policía, la corredora de largas distancias, la doctora, el estudiante universitario, el repartidor de comida... Cada uno se despertó en una punta distinta de dicha urbe; cada uno de ellos acabaría convergiendo en el peor sitio de encuentro. Y es que a pocos metros de la línea de meta de uno de los maratones más históricos del mundo, se detonarían dos artefactos explosivos caseros que causarían tres muertos y 282 heridos.

Con “Día de patriotas”, Peter Berg sigue construyendo una de las carreras cinematográficas que mejor está captando el geist americano actual. Con una puesta en escena vibrante y un tono siempre en la fina línea que separa la crítica implacable del el patriotismo más enfervorizado (ahí está su encanto), este director neoyorkino vuelve a retratar uno de los episodios recientes más traumáticos de su nación (recordemos, su última película se centró en la catástrofe natural del Golfo de México de 2010). El resultado es una potente crónica histórica que no precisa de perspectiva histórica alguna para que el más incómodo de los escalofríos recorra nuestro cuerpo.