Jon ORMAZABAL
Pelota

«Etxekalte» por Ultzama

Bengoetxea-Larunbe dejan prácticamente sin opciones de pasar el corte a unos fallones Laso-Albisu.

BENGOETXEA VI-LARUNBE 22

LASO-ALBISU 17

 

«Etxekalte» es una expresión en euskara que literalmente significaría «que trae la ruina a la casa» y que en los diccionarios viene definida como «pródigo o despilfarrador», cuando se utiliza como adjetivo, que sirve perfectamente para describir lo sucedido ayer en el Municipal de Larraintzar. Sin duda, fueron Laso-Albisu, los más necesitados de ese punto en juego, los que más piedras lanzaron contra su propio tejado, acumulando hasta diez errores en juego, más otros tres saques absolutamente restables que se le escaparon al de Bizkarreta de sotamano, en un duelo en el que desperdiciaron una magnífica ocasión de meterse de lleno en la lucha por superar el corte, pero tampoco unos desahuciados Bengoetxea VI-Larunbe colaboraron en exceso al bien común de su empresa, aunque no hicieron otra cosa que cumplir con su obligación como profesionales.

Tampoco es que los actuales subcampeones jugaran, ni mucho menos, su mejor partido del Parejas una vez que se habían quedado sin opciones de clasificarse para semifinales. De hecho, este mismo año han perdido algún que otro partido jugando bastante más, pero esta vez una actuación aseada les sirvió para volver a la senda del triunfo, que tanto necesitaban. Eso como pareja, mientras que individualmente Bengoetxea sigue mostrando evidentes signos de mejora en su aspecto físico y, consiguientemente, de juego, mientras que Larunbe, en un buen Parejas, se sacó la espina de su mala actuación la pasada jornada en Gasteiz y mejoró mucho sus prestaciones de hace tres semanas en el mismo escenario de ayer.

La credibilidad puede ser uno de los puntos débiles de la pelota, y prácticamente cualquier deporte profesional con tanto interés cruzado, pero tanto el viernes en Bergara como ayer en la localidad de Ultzama, dos parejas sin aparentemente mucho en juego cumplieron con su parte aunque eso chocara con los intereses deportivos de sus compañeros y empresa, el punto más positivo del intenso fin de semana.

Los azules, precipitados

Porque el partido de Larraintzar tampoco sació a los pelotazales. Laso hizo probablemente las cosas más espectaculares, pero a su vez las combinó con errores que ensombrecieron su labor. El bravo delantero de Bizkarreta estuvo especialmente errático con el sotamano, jugada con la que dejó sin devolver hasta cuatro pelotas, tres de ellas en saques, concentrados en la parte inicial del partido, en la que los azules se descolgaron, lo que les obligó a jugar todo el partido contra corriente.

Y, por juego, se vio que el de ayer era un partido que el navarro y el ataundarra podían haber sacado adelante si su fiabilidad no fuera tan endeble. Porque consiguieron volver a meterse en la pelea en hasta dos ocasiones, reduciendo la desventaja a su mínima expresión en el 8-7, tras ir perdiendo 8-2, y a solo dos tantos en el 17-15 tras descolgarse 17-10. Pero en ambos casos Jon Ander Albisu cometió errores de bulto que frenaron en seco sus remontadas y les privaron de una victoria que se antojaba imprescindible.