MARILÓ MÉNDEZ
GUTUNAK

Sukarrieta y en qué lo desean convertir

Desde niña (nací en el año 42) he escuchado la cantinela, también mis mayores la escucharon, de que el antiguo municipio de Busturia deseaba adueñarse de la islita de Sandindere, Abiña y terrenos aledaños pertenecientes todos a Sukarrieta desde tiempo inmemorial. Tanto es así que precisamente Sukarrieta nació en esa isla antes de 1400, según consta en los libros consultados, donde estuvieron ubicados el cementerio y la parroquia –unidos a Abiña por un puente de madera– que con el tiempo se deterioraron y fueron trasladados a lo que ahora es el centro del municipio. Estos terrenos (Sandindere, Abiña y colonias de la BBK) nunca constituyeron un enclave hasta que hace unos años, por «arte de magia» se convirtieron en tal.

Resulta que ahora el «enclave» debe desaparecer y la Diputación ha encargado a Juntas Generales de que así lo hagan. Las Juntas Generales reunidas en Gernika el 14 de diciembre de 2017 sin, por supuesto, consultar con las quince familias que habitan la zona de Abiña, con su vergonzoso voto de abstención (40 abstenciones de 51 si no me equivoco) regalaron a Busturia el bendito y tan anhelado enclave.

Si a nuestro diminuto Sukarrieta (2 kilómetros cuadrados, parte de ellos en Kanala, al otro lado de la ría de Urdaibai) le roban el lugar en el que nació (Sandindere), la ermita de San Antonio y las colonias de la BBK, lo dejan mutilado físicamente y en la más pura miseria económica. Una gran injusticia la que desean cometer contra nuestro pueblo cuando a nadie se le escapa que para hacer desaparecer un enclave existen varias formas. Nosotros no deseamos un centímetro de territorio ajeno, tampoco que nos quiten lo nuestro. Que los autores del entuerto lo deshagan y nos dejen vivir en paz.

P.D. Sukarrieta es el segundo pueblo más pequeño de Bizkaia.