El Bidasoa-Irun, con los deberes hechos tras asegurarse matemáticamente la permanencia en la Liga Asobal, visita esta noche (20.30) a un Guadalajara al que aspira a volver a ganar como en la primera vuelta (31-28).

Quedan solo cuatro jornadas para el final del torneo doméstico y, aunque la mayoría de sus rivales necesitarán los puntos para diversos objetivos, el de los irundarras es acabar la Liga con las mejores sensaciones posibles y afianzar, al menos, la 11ª posición que ocupan.

El entrenador del Bidasoa-Irun, Jacobo Cuétara, recordó que Guadalajara «es uno de los equipos que más me gusta y que llegó a luchar por entrar en Europa, pero no atraviesa un buen momento y ha perdido casi todas las opciones. Es una pena por la trayectoria tan buena que llevaba». Y es que de los últimos siete partidos, el equipo alcarreño ha perdido seis y empatado uno, y ahora tiene los puestos europeos a cuatro puntos, con varios candidatos más, entre ellos Helvetia Anaitasuna.

«Acabar con buen sabor»

Cuétara explicó que el Guadalajara «es un equipo que provoca muchos errores en ataque. Hay que tener orden y control, saber a lo que juegas. Tienen jugadores de mucho potencial ofensivo, no puedes centrarte en parar solo a uno porque entonces los demás te pueden hacer mucho daño».

De cara al tramo final, señaló que «quedan cuatro partidos de Liga Asobal más la final a cuatro de la Euskal Kopa y hay que intentar unificar los objetivos individuales para seguir compitiendo al máximo nivel y sumar el mayor número posible de puntos, para poder acabar con buen sabor de boca».