La calma parecía haber vuelto ayer a la Franja de Gaza y sus alrededores después de una madrugada en la que el enclave fue objeto de más de 70 ataques contra supuestas posiciones de Hamas y la Yihad Islámica y se realizaron más de un centenar de lanzamientos de proyectiles contra territorio israelí, en medio de informaciones contradictorias sobre un alto el fuego.

Hamas confirmó por la mañana el anuncio realizado la víspera por la Yihad sobre una tregua con Israel con la intermediación de Egipto. Pero Israel negó ese acuerdo, aunque los bombardeos israelíes se detuvieron, al menos provisionalmente.

La Franja de Gaza, rodeada por Israel, Egipto y el Mediterráneo, y las zonas fronterizas israelíes sufrieron el martes el enfrentamiento más serio entre las fuerzas israelíes y los grupos armados palestinos desde la guerra de 2014.

Israel dijo haber golpeado con su aviación y su artillería decenas de posiciones de Hamas, que gobierna el enclave, y de la Yihad Islámica, segunda fuerza, cuyos brazos armados reivindicaron el lanzamiento de decenas de proyectiles contra Israel en respuesta a sus ataques.

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, advirtió ayer a Hamas que «pagará mucho más» si continúa el lanzamiento de proyectiles. «Si nos ponen a prueba, pagan inmediatamente», sostuvo.

Esta nueva escalada fue llevada ayer al Consejo de Seguridad de la ONU, donde EEUU reclamó una condena a Hamas, que fue rechazada, a quien consideró único responsable de la actual crisis en Gaza. Según fuentes diplomáticas, Kuwait frenó la propuesta de EEUU, quien en las últimas semanas impidió una resolución sobre la muerte de palestinos en la frontera de Gaza. EEUU rechazó el punto clave de una iniciativa planteada por Kuwait para pedir protección internacional para los palestinos.

Ayer, el joven palestino Naji Ghoneim, de 23 años, sucumbió ayer a las heridas que le provocaron soldados israelíes durante las protestas de la semana pasada en la frontera entre Gaza e Israel, lo que eleva a 122 el número de palestinos fallecidos desde que se iniciaron los disturbios el 30 de marzo, 118 de ellos civiles.

Otra escalada que amenaza la vida de los niños

Unicef ha alertado de que la confrontación militar de los últimos dos días en la Franja de Gaza «amenaza de nuevo la vida y el bienestar de niñas y niños», parte de los cuales ya han vivido tres graves escaladas del conflicto en la última década.

«Hoy los niños de la zona han presenciado, una vez más, cómo la violencia sólo genera más violencia. La violencia no pertenece a ninguna sociedad en la cual se respetan los derechos fundamentales de los niños», advirtió.

La agencia denunció los daños sicológicos y físicos que ha supuesto para la infancia la violencia de las últimas semanas, especialmente la represión de las manifestaciones organizadas desde finales de marzo. Unicef subrayó que todas las partes tienen la «obligación» de «proteger a los niños bajo cualquier circunstancia».

La mitad de los niños de la Franja de Gaza dependen de la ayuda humanitaria y uno de cada cuatro necesita atención sicosocial. Más del 90% confiesa que han sufrido violencia en casa, en la escuela o en la calle, según los datos de la ONU.GARA