Imanol INTZIARTE
RUGBY

Nueva Zelanda recupera su hegemonía en el Seven con un doblete en San Francisco

Sus dos selecciones repiten el oro del Mundial de Moscú 2013. Inglaterra ySudáfrica completan el podio masculino, Francia y Australia el femenino.

Nueva Zelanda ha recuperado su reinado en el Seven con un doblete en el Mundial de San Francisco que revalida los títulos obtenidos en Moscú hace cinco años y pasa página, aunque la herida siempre permanecerá ahí, respecto a los Juegos de Río 2016, donde las Black Ferns fueron plata y los chicos se dieron un sonoro batacazo al no pasar de cuartos.

En las dos últimas ediciones de las Series Mundiales, los de negro han estado en la general muy lejos de la cabeza y solo han sumado una victoria en veinte citas.

Decíamos en la previa del viernes que una de las características de esta modalidad es que al ser los partidos tan cortos no hay casi tiempo de recuperarse de un error, menos con un formato de eliminatorias directas desde el principio.

Dicho y hecho, las semifinales reventaron las quinielas. En la primera, Inglaterra remontó el ensayo inicial de Sudáfrica, devolvió el golpe multiplicado por cinco y se fue hasta un abultado 29-7. En la segunda los All Blacks apeaban a una Fiji que ha contado con varias estrellas del Top 14 como Tuisova (Toulon), su excompañero Radradra –que ha fichado por Burdeos– o Nakarawa (Racing).

En la lucha por las medallas, Nueva Zelanda superó con amplitud a Inglaterra (33-12) –tercera plata seguida entre Mundiales y Juegos–, mientras que Sudáfrica se hizo con el bronce ante Fiji (24-19).

Tampoco ha estado exento de sorpresas el torneo femenino. La más relevante también llegó en semifinales, por el fondo y por la forma. Australia llegaba como vigente campeona de las Series Mundiales y aspiraba a sumar este oro al conseguido en los Juegos.

En el penúltimo peldaño antes de la final se topaban con Francia, un equipo en crecimiento. Al descanso Australia ganaba 12-0, pero Francia reaccionó para hacerse con la victoria con un ensayo cuando ya había sonado la sirena (12-19). Primera medalla para un equipo femenino europeo en la historia de la Copa del Mundo.

Este resultado despejaba a Nueva Zelanda el camino hacia la reedición de la corona, aunque sudaron en semifinales para apear a EEUU (26-21).

La final no tuvo historia. Francia, agotada, fue barrida por las de negro (29-0). Hat trick de Michaela Blyde, para un total de nueve ensayos en cuatro encuentros. El bronce se lo llevó a Australia, dejando a las anfitrionas con la miel en los labios (24-14).