REAL 3

OSASUNA 2

La Real se impuso 3-2 a Osasuna en el amistoso disputado en el abarrotado campo de Agorrosin, en Bergara. El nuevo proyecto del técnico Asier Garitano, que ayer volvía a su casa, sigue progresando de forma adecuada, tras lograr un nuevo triunfo, no sin sufrimiento, para mantener el invicto ante un Osasuna que, de la mano de Jagoba Arrasate, ha tenido una clara evolución.

De hecho, el conjunto navarro se adelantó muy pronto en el marcador gracias a un gol de Nacho Vidal, finalizando una buena jugada por la banda derecha. El tanto serviría para espolear a los guipuzcoanos que, no obstante, y tras recibir el gol, sufrieron ante un Osasuna que pudo marcar el segundo en un remate al larguero de Mérida.

Pero lo que suele ocurrir en este tipo de situaciones es que si se perdona llega el castigo. Ese castigo no fue otro que el empate logrado por el brasileño Willian José. El ariete jugó desde el inicio, encabezando un once que se puede parecer bastante al que arrancará el primer partido de Liga en agosto, y se erigió como el mejor del partido. Y si el empate no fue suficiente mazazo, Zubeldia –jugando otra vez de central, con Héctor Moreno en el lateral izquierdo–, adelantó a la Real en el descuento, encarrilando el partido.

Por detrás en el marcador, Osasuna estuvo bien en la segunda mitad, con ese juego colectivo que plantea Arrasate y que puede encandilar a los seguidores rojillos. Aunque costó, lograron empatar a cuatro minutos del final gracias a un tanto de David García. Pero la alegría fue efímera, ya que en la siguiente jugada Rubén Pardo establecía el 3-2 con un gran disparo desde fuera del área. Pero el resultado es lo de menos.