Joseba VIVANCO
FÚTBOL

A falta de «Dios» el culé se encomienda al «Pistolero»

Los azulgranas golean 5-1 con tripleta de Luis Suárez a un Madrid sin alma, resultado que termina de sentenciar a Julen Lotepegui en el banquillo blanco.

Qué razón tienen cuando se saca a pasear ese axioma de que el fútbol es un estado de ánimo. Que se lo digan al Real Madrid, un alma en pena en una primera mitad del ‘clásico’ con 2-0 en contra como para echar al equipo entero y no solo a Julen Lopetegui, y un vendaval en la reanudación para ponerse 2-1, aunque para estado de ánimo y motivación el del ‘Pistolero’ del área, el charrúa Luis Suárez, que a falta del ‘Dios’ Messi firmó un hat-trick para festejar el nacimiento de su tercer hijo, al que dedicó el primero y el resto a los otros dos retoños sentados en primera fila del Camp Nou junto a un Leo Messi que celebró la goleada, 5-1, como un culé más. Ayer cambió la hora, hoy puede que cambien a Julen Lopetegui.

Las distintas inercias con las que llegaban Barça y Madrid al enésimo ‘partido del siglo’ se reflejaron desde el pitido inicial, sobre todo cuando un pletórico Jordi Alba olió sangre al ver que era Gareth Bale el encargado de ‘no marcarle’ y por allí avisó para luego, libre de marca, pisar área, ceder atrás y allanar el brasileño Coutinho la victoria. Amo y señor el conjunto de Ernesto Valverde en una primera mitad en la que Suárez, desde el punto de penalti, hizo el segundo ante un rival desnortado, sin corazón ni justificación. «Hay que dar la cara más, correr más, pelear más», reconoció al final del choque el merengue Casemiro. Ese orgullo blanco que dejó ver el Madrid tras la reanudación, cambiando a un 5-3-2 para frenar a Alba, dando a los azulgranas de su misma medicina del primer tiempo, presión alta y asfixiante y robo cerca de la meta de Ter Stegen. Acortó Marcelo, envió un balón a la madera Modric, el Real Madrid acogotaba al Barça, el Barça buscaba a un Messi que no estaba... y apareció Suárez. Una bestia parda.

Suena Antonio Conte

El uruguayo, en línea ascendente tras un irregular comienzo de temporada, remató primero a la madera y no perdonó la contra que acabó con un testarazo suyo a la red de Courtois. Todo a partir de que Valverde diera entrada a Semedo para frenar las subidas de Lucas Vázquez. Al segundo gol le siguió un tercero del sudamericano, y otro más, el quinto, de un Arturo Vidal recién salido al césped.

El Madrid de un sentenciado Lopetegui se llevó la manita, pero pudo ser la media docena. Conjunto madrileño que se pone ahora a siete puntos del líder culé, es noveno en la tabla, firmando, además, su peor arranque liguero desde 1948. Suena el italiano Antonio Conte para poner orden en la Casa Blanca, como también Roberto Martínez. Coge aire Txingurri Valverde, en el Barça hay vida sin Messi, las acciones de Florentino Pérez caen, se marca una croqueta Tomás Roncero, mal día para Santiago Abascal, la imagen de VOX, que dijo querer que pierdan siempre Athletic y Barcelona.