Panorama
Es difícil elegir el tema, la inspiración. Por abundamiento. Por exceso. Cuando no hay nada, crece la imaginación. Cuando hay demasiado, crece la angustia. Menudo panorama. Lo que provoca mayor inquietud es el trapicheo entre los dos partidos turnistas para repartirse los cargos y presidencia del mando general en el Poder Judicial, es decir, de ese grupo de personas que después servirán de escudo para los políticos que los han nombrado, que actuarán a su dictado y que perpetuarán una sensación en toda la sociedad de que la Justicia española es muy poco fiable. De repente el gobierno de Sánchez y Zipi Casado, se en tienden a las mil maravillas. Mal asunto.
Lo de Podemos en Madrid, es un nuevo síntoma de un deterioro absoluto de una formación política trufada de la mediocridad de personas pegadas como lapas al aparato y que quieren medrar. Intentar de manera obsesiva y militar que su candidato sea un general, Julio Rodríguez, es un error monumental. Ha fallado en todas las convocatorias electorales que ha participado. Es el jefe de Madrid capital y con buen aire militar autoritario, en unión con Ramón Espinar, un desastre total, han suspendido a seis ediles de equipo de Carmena como costados. No militantes sin ninguna garantía procesal. Podemos está agujereado por todos los hay por dónde cogerlo. Son capaces de perder Madrid por sus putos egos. Y sueldos, claro está. Y no parecen tener solución. A no ser que consulten con su amigo el comisario Villarejo. Impactante es conocer que, en Valencia, a los que muertos con obesidad mórbida no los incineran alejando problemas de contaminación excesiva. Tampoco a los muertos por cáncer. Es un tema complicado. ¿Quién decide estas cosas? ¿Hay un reglamento medioambiental para la incineración de cadáveres? Ni morirse tranquilos dejan. Gordofobia.