Ciclistas sin apenas carreras
Elorza deja la bicicleta con 27 días de competición en dos años y Malatsetxebarria, con 24, espera seguir.
Mikel Elorza (Azkoitia, 1991) y Oskar Malatsetxebarria (Munitibar, 1995) representan la otra cara del ciclismo. Ante la falta de oportunidades en casa han corrido las dos últimas campañas en equipos continentales que no pueden ofrecerles un buen calendario y entre ambos han sumado en dos años 51 días de competición muy espaciados sin opción de preparar objetivos y de coger el ritmo necesario.
Por eso Mikel Elorza ha decidido dejar el ciclismo: «El próximo año cumplo 28 años, tenía un par de opciones y, de hecho, en noviembre estuve en una concentración de un equipo continental extranjero. Pero yo quería poner unas condiciones mínimas de salario y calendario y, como no podían garantizar ni lo uno ni lo otro y nadie cedía, prefiero dejarlo. Me da mucha pena, pero es lo que hay».
Sobre todo no quería ser ciclista sin carreras como estos dos años. El primero con Amore&Vita corrió doce días y éste con el Inteja dominicano quince: «Lo que más me tira para atrás es el calendario. No puedes estar 330 días preparándote para correr quince y sin una planificación. No sabes si vas a correr o no. No merece la pena».
Este año esperaba tener más calendario y corrió casi seguido Lizarra, Castilla León, Madrid y Aragón, pero desde mayo solo estuvo en el Tour de Beauce en junio en Canadá y en Ordizia: «Había bastantes carreras que eran duda que no hemos hecho y lo que podían ser 45-50 días de competición se han quedado en quince. La pena es que no he tenido un año con 70 días todo bien planificado. Igual con eso tampoco lo demuestras y no tienes nivel, pero no he podido probar decentemente un año».
De su etapa como ciclista se queda «con los amigos, la gente y todas las experiencias que me ha dado el ciclismo. Con las cosas que tienes que hacer bien y te valen para la vida. Todo lo que debes hacer para ser profesional, tener las cosas tan estructuradas, me valdrá».
A espera de la confirmación
Oskar Malatsetxebarria espera seguir en la estructura con la que ha corrido los dos últimos años: «No sé mucho. No he hablado demasiado, pero me dijeron que con Kuwait se terminaba y que Massi seguía apoyando el ciclismo, que se juntaba con otro país. Me dieron un par de opciones de países y parece que se han juntado con Paraguay».
Espera que «se confirme todo cuanto antes y se inscriba el equipo y sea todo más rápido. Es lo ideal para tener mejores carreras. Este año pasó eso con la Federación de Kuwait, que faltaba algún papel y empezamos en abril a correr. Me han dicho que en teoría tienen previsto empezar en marzo. Ya sabes cuando empezamos y llevas una preparación. Este año pasado pensábamos que empezábamos a principios de febrero y te planteas entrenar para llegar a ese mes bien y no tienes carreras hasta abril y cuesta. Tienes que parar y empezar otra vez».
Así recuerda que «la temporada la empezamos en Amorebieta y, como el equipo salió tarde, no había invitaciones en carreras españolas y hemos corrido en Portugal tres vueltas, en Italia, Rumanía y Francia. Unos 22 días de competición. En la categoría continental es difícil como en nuestro caso correr. Vas a una carrera, la siguiente es de ahí a un mes y es difícil mantener la forma y estar bien. El ritmo se coge en competición y llegas a una carrera y te cuesta cogerlo y cuando lo coges no corres en otro mes y al final cuesta más. Si corres poco es difícil».
Pese a todo Oskar quiere seguir porque considera «una gran oportunidad correr, aunque sea poco, con los profesionales por todo el mundo. Me dijeron que contaban conmigo y a ver si tenemos un poco más de carreras para mantener la forma. Así es un poco más fácil hacer algo en vez de solo terminar. Este año pasado el objetivo era casi ir a terminar las carreras.
Corrió con el Movistar como rival en Zornotza, Getxo y Ordizia y en Rumanía en el Sibou Tour participaban Androni, CCC, Gazprom y la vuelta la ganó Sosa, que ha fichado por Sky. El ciclista vizcaino destaca que «es bueno correr con ellos para acostumbrarse a su ritmo. Aunque no vayas bien, tienes que esforzarte más para seguirlos y mejorar». Pero, ante todo, necesitan más días de competición.
La pena de no poder correr en casa
Los casos de Elorza y Malatsetxeberria son similares al de Jokin Etxabe, que como el azkoitiarra, ha anunciado su retirada con 24 años después de correr dos años en el Aevolo y el Interpro, que dejó en junio porque no le pagaban lo acordado. A pesar de que llegó a sumar 78 puntos UCI este año al ser segundo en una etapa y tercero en la general de Indonesia y octavo en Marruecos, tuvo que recalificarse como amateur en el Gomur con la esperanza de que le dieran la oportunidad los dos equipos vascos y nadie se la dio.
Elorza trasmite que «me da pena tener dos equipos y que muchos vascos no tengamos la oportunidad un año. Son proyectos vascos y fichan a un bielorruso, un murciano, un asturiano y un cántabro. Y no lo digo por mí, también por los jóvenes, que solo han pasado tres y no sé qué futuro van a tener si los equipos vascos van a coger lo que quieran. Decir que eres como el Euskaltel y hacer esos fichajes... Los equipos pueden hacer lo que quieran, pero pedir que se involucre gente vasca y coger gente de fuera...». J.I.