Raimundo Fitero
DE REOJO

Instancia

Sin cordones ni condones sanitarios, el PPOX se manifiesta por la boca de sus más conspicuas voceras como un defensor de la tesis del pistolero de Amurrio, ahora ya retratado de manera más evidente con su descarado capital iraní para su funcionamiento, es decir, es un gran patriota musulmán, protegido de un partido oscuro, muy oscuro, considerado en ciertos lugares como terrorista, tan oscuro como su alma de mentiroso compulsivo. En quince días ya se ha conocido que de este grupo parafascista no hay ni un centímetro limpio.

Por otro lado, la retahíla actual del trifacio es anunciar su disposición providencial para combatir a los independentistas, comunistas y proetarras, dichos los tres adjetivos de manera seguida como si fuera una sarta de conceptos equiparables, aprendido en la célula conventual. La manifiesta obsesión anticomunista empieza a ser una fobia franquista que se manifiesta de manera pandémica.

¿Dónde estarán los comunistas hoy en día? Yo veo al Garzón joven, el que se dice comunista, casándose como si fuera un terrateniente, y maldigo el mal uso del término. Voy a echar una instancia de ingreso en el cielo de los comunistas libertarios, que a veces está muy cerca del marxista. Lo hago en nombre de Rosa de Luxemburgo. Ha pasado su aniversario de la manera anodina que caracteriza estos tiempos de militancia líquida. El único agente del orden verdaderamente efectivo ha sido durante décadas el magnífico y ubicuo comisario Villarejo, que ahora destapa los asuntos mafiosos de los directivos del BBVA para mantenerse en el poder. ¿Queda algún estamento de la marca España libre de corrupción y actividades delictivas? La gran banca es lo que parece, una gran mierda. Una instancia simbólica de un derrumbe democrático. Con esta secuencia integrista: Dios, Rey, Patria, Banca.