Julen Amarika (Loiu, 1995) logró el sábado en Villarreal su primera victoria de la temporada y la sexta como amateur tras ganar en 2016 y 2017 en Zumaia y el año pasado en Villasana y en las última etapas de las vueltas a Nafarroa y Vetusta, lo que solo le valió para tener una opción pobre de un equipo portugués.

«Era una oferta muy precaria de un continental. Me ofrecía un sueldo bastante bajo que me lo iba a gastar en viajes y para que salga parecido me quede en Telco’m, que voy a estar más a gusto y me van a cuidar mucho mejor para intentar destacar y buscar algo mejor», explica Julen Amarika a GARA.

No solo él, todo el Telco’m destacó en la prueba castellonense: «Arnau ganó las metas volantes y la combinada, Urruzmendi la regularidad, yo la montaña y por equipos. Dimos muy buen nivel. No fueron todos los equipos de la Copa, pero sí Caja Rural y Lizarte y en los del Mediterráneo hay gente buena y siempre es difícil ganar. Hicimos una vuelta muy buena, el primer día me fui en fuga con Arnau, que se fue solo porque no pude más al ser un final duro y le cogieron a falta de 200 metros. En el grupo de atrás de doce entraron Buades y Urruzmendi e hicimos cuarto, sexto y noveno. El sábado nos tocaba a Onditz y a mí para el sprint y metimos en la fuga a Marc, que estaba a un minuto y en la parte final tomamos el mando del pelotón, que iba Amores escapado y lo cogimos. En el sprint habíamos hablado de que era clave entrar bien en la curva, Onditz iba primero y yo segundo, y sprintamos a tope los dos».

Al día siguiente Urruzmendi fue cuarto en la última prueba de la Copa de España. Amarika destaca que «antes no le conocía personalmente, pensaba que sprintaba bien y subía algo, pero sube mucho mejor de lo que pensaba. Entrar en Morella en un grupo de doce, que son puertos duros, demuestra que sube muy bien. En Macario no le acompañó el equipo. Estábamos cansados y se notó en el último kilómetro, que se quedó cerrado. Encontró hueco al final y por lo menos demostró que tiene técnica y hambre, no se conformó con el segundo puesto del sábado, y además es rápido».

Telco’m ha conseguido con Arnau, Buades, que ganó en Urraki, Amarika y Urruzmendi un buen bloque. Está encantado con el equipo porque «nos da a los élites la oportunidad de correr un calendario muy bueno con la Copa de España y muchas vueltas. Es muy importante que venga un exprofesional como Marc y los cuatro trasmitimos la experiencia. No somos gente que nos limitamos a ganar y hacer buenos puestos. Intentamos ser un equipo, que cada corredor del Telco’m funcione bien».

Una liberación

Su victoria del sábado en Villarreal fue una liberación para él: «El año pasado anduve mejor en la Copa, este se estaban complicando los resultados y tenía la sensación de que hacía las cosas muy bien y eso no se terminaba de ver. Es una liberación poder levantar los brazos, estoy haciendo las cosas bien y cuando se trabaja bien las cosas salen».

Su próximo objetivo es la Vuelta a Nafarroa tras lograr su victoria más importante allí: «Telco’m es navarro, es la vuelta de casa, se sabe que es importante y habrá que dar el callo. Sin ninguna duda ha sido mi mejor victoria porque gané en Villasana desde la fuga, pero suelo ganar al sprint y aquella victoria supuso una superación personal porque pasé Guirguillano y Etxauri en una fuga».

También en Morella el viernes demostró que sube al ganar la montaña: «Además había mucho viento de cara y mal tiempo y superar el primer puerto en cabeza con Arnau fue importante hasta que vi al final que yo era un lastre y le dije que tirara para adelante», recuerda.

Amarika, además de destacar en Nafarroa, se marca el objetivo de «hacer un buen campeonato de España de crono –el año pasado fue el 27º– y en las pruebas del Euskaldun y en las vueltas buscar ganar carreras y que se oiga mi nombre».

Pocos ciclistas vascos no han tenido la oportunidad de pasar a profesionales tras sumar seis victorias en el campo amateur: «Creo que estoy haciendo cosas como para merecer una oportunidad y luego si no valgo se verá. Mucha gente ha tenido la oportunidad, se ha visto que no ha valido y ya está. Pero cada año estoy más tranquilo. Igual el fin tampoco es pasar sí o si, sino disfrutar y quedar uno contento consigo mismo. Seguimos luchando por eso, disfrutando de lo que hacemos».

Es un corredor vasco atípico, sprinter y rodador, que cree que podría encajar en el profesionalismo: «No se puede descubrir un corredor en amateur. A ver si llega». Entiende que «Murias tiene gente de perfil parecido al mío como Aristi y podría encajar ahí como uno más para las Copas de Francia, que me vendrían muy bien, pero verán que no me adapto a su equipo...».