La última jornada del Mundial de Piragüismo de Szeged (Hungría) dejó una de cal y otra de arena para los deportistas vascos. Si bien Iñigo Peña logró el billete para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Begoña Lazkano lo tiene casi imposible.

El palista zumaiarra y su compañero Paco Cubelos volvieron a colgarse la medalla de plata , tal y como hicieran el pasado año en Portugal. Demostraron que son una de las grandes referencias a nivel internacional y que ahora mismo solamente son superados por Alemania en el K2-1.000 metros. Tanto en las Copas del Mundo como en Europeos y Mundiales han cosechado numerosos éxitos en los últimos tres años; entre ellos, la plata en el Mundial de Montemor O’Velho y el bronce en el Europeo de Belgrado en 2018.

Peña y Cubelos han trabajado las salidas durante este año, y la mejoría es palpable. Se colocaron en los puestos delanteros desde el inicio y no cedieron tampoco en los últimos metros para volver a subir al podio. La medalla era uno de los objetivos y el otro la clasificación olímpica del K2-1.000 metros. Las seis primeras embarcaciones de la final A conseguían el billete para disputar los Juegos de Tokio 2020.

Es por ello que Iñigo peña señaló al término de la prueba estar «más que satisfechos. Objetivo doblemente conseguido. Era un Mundial muy complicado, donde había que luchar por una medalla y una plaza olímpica. Hemos conseguido las dos cosas. Hemos confirmado nuestra gran trayectoria y nos postulamos como uno de los grandes favoritos para conseguir medalla en Tokio».

Eso sí, se volvió a demostrar que Alemania es uno de los rivales a batir, tanto en este Mundial como lo será también en Tokio. «Alemania lleva confirmando que es el gran dominador de la prueba de K2. El año pasado fueron campeones del mundo y este también. Serán los grandes favoritos en Tokio 2020. Nos queda un año de trabajo por delante; cada vez parece que estamos más cerca. Este año hay que pulir detalles, a trabajar más y mejor y a ver si el año que viene ese metro que nos sacan cae de nuestro lado», subrayó el zumaiarra.

Lazkano, casi sin Juegos

Peor le fueron las cosas a la cuarteta de Begoña Lazkano, ya que fue sexta en la final B del K4-500 metros. La palista donostiarra y sus compañeras, Contreras, Ouzande y García, tenían que ganar la regata o ser las mejores europeas para poder adjudicarse una plaza para Tokio, pero ninguna de las dos cosas ocurrió, ya que China fue la vencedora y Dinamarca y Gran Bretaña terminaron por delante de ellas. Ahora es «imposible» lograr el billete, según señaló una Begoña Lazkano muy decepcionada, casi sin palabras, ante las cámaras de Basque Team. «No ha sido nuestro mejor día. Se ha intentado, pero se ha hecho una carrera dura, larga y no ha sido posible», indicó.