Joseba ITURRIA
REAL

Demasiado castigo para un equipo tocado y vulnerable

La Real fue capaz de igualar dos goles de desventaja en un segundo tiempo en el que Imanol recurrió a los jóvenes del Sanse ante las bajas, pero la tercera jugada de ataque bastó al Granada para dar la estocada. Isak, Odegaard y Monreal no pudieron jugar el partido.

REAL SOCIEDAD 2

GRANADA CLUB FÚTBOL 3


Una Real mermada por sus problemas físicos y rematada por sus debilidades defensivas en las pocas ocasiones en las que los rivales llegan al área se complica sus opciones europeas al perder ante un Granada al que solo le valía la victoria para meterse en la pelea por la séptima plaza y la logró para colocarse octavo empatado con el Valencia a un punto de los realistas.

Una Real plagada de chavales peleó contra la adversidad y el fútbol fue demasiado cruel con sus errores. Aunque Imanol decía tras el último entrenamiento que no había más bajas, tras el partido reconoció que Isak, Monreal y Odegaard no llegaron a calentar porque no estaban ni para eso. Tuvo que recurrir de inicio a Barrenetxea, que aportó la frescura que le falta al equipo hasta que se le acabó la gasolina y se vio obligado a acabar el partido, como Zubimendi. Imanol se encomendó al Sanse, Nais Djouahra fue el primer cambio y jugó unos minutos excepcionales y dio la asistencia del empate, pero a los pocos minutos llegó el golpe definitivo.

Al Granada solo le valía ganar y Diego Martínez planteó el partido con un 5-2-3 muy ofensivo en ataque. Sus laterales subían, uno de sus dos medios centros, Yangel Herrera, jugaba muy adelantado y un central como Domingos Duarte dio la asistencia del 0-1 desde cerca del área ante una Real demasiado replegada y marcó el 2-3 al ganar la espalda a Aihen. Tres balones a la portería y los tres entraron.

En el segundo Llorente jugó como un desconocedor de una regla injusta porque debía dejar pasar el balón que iba a Carlos Fernández, en fuera de juego, como Soldado, pero lo intentó cortar y habilitó al delantero.

La Real tuvo más opciones en el primer tiempo, dos claras de Barrenetxea y dos de Portu, y no marcó y al Granada le bastó con eso para ponerse con un 0-2. Pero esta Real no se rinde por nada que le pase. Merino metió a su equipo en el partido, Willian José y Djouahra tuvieron dos claras opciones para empatar y el extremo del filial dio además la asistencia al gol de Oyarzabal que hacía justicia a lo visto en el partido. El punto sabía a gloria, pero la Real no pudo mantenerlo porque al Granada le bastó con lanzar un balón al área para lograr la victoria que necesitaba.

Imanol: «El fútbol está siendo injusto y cruel»

Imanol reconoció sentir rabia y dolor tras el partido, pero también se mostró «súper orgulloso de este equipo, de este grupo de chavales que ante la adversidad no deja de trabajar ni de intentar jugar ni de ir a por el partido». Añadió que «el fútbol está siendo súper injusto y súper cruel. Algún día espero que a estos chavales todo lo que nos están quitando en esta parte final se lo devuelvan porque creo que por toda la intención, por todo lo que están haciendo, se merecen mucho más. Ya veis que el equipo incluso en los momentos malos ha seguido creyendo, ha seguido insistiendo y lo va a hacer hasta el final, pase lo que pase. Una vez más otro palo, más gordo, duro y cruel, pero nos vamos a levantar». J.I.