La Justicia chilena halló culpables ayer a siete policías y un abogado por la emblemática muerte del joven comunero mapuche Camilo Catrillanca, de 24 años, un crimen que conmocionó al país en noviembre de 2018, generó una ola de indignación y despertó infinidad de críticas contra el cuerpo de Carabineros.

El Tribunal Oral en lo Penal de Angol declaró al exuniformado Carlos Alarcón culpable de homicidio por efectuar los disparos que provocaron la muerte de Catrillanca en Temucuicui, en el sur de Chile, y de homicidio frustrado en relación al adolescente mapuche que le acompañaba. El resto de acusados fueron condenados por apremios ilegítimos, obstrucción a la investigación o disparo injustificado, entre otros delitos.

El juicio, que comenzó en marzo y se retomó en octubre tras un parón por la pandemia, se prolongó durante 37 jornadas, que culminarán con la lectura de las penas el 28 de enero.

Los hechos tuvieron lugar el 14 de noviembre de 2018 en medio de una operación Comando Jungla –equipo especial de Carabineros que el Gobierno desplegó en el territorio mapuche supuestamente para controlar los hechos de violencia y «reforzar la seguridad»–, cuando una bala alcanzó en la nuca a Catrillanca mientras viajaba en un tractor con un adolescente de 15 años.

El caso, marcado desde el comienzo por irregularidades y versiones contradictorias de los condenados, hizo temblar los cimientos del cuerpo de Carabineros, que inicialmente dijo que los agentes habían sufrido una emboscada y que el vehículo de Catrillanca se cruzó en el tiroteo.

El peritaje de la Fiscalía –y el testimonio del adolescente que le acompañaba– demostró, sin embargo, que esta versión era falsa y Alarcón, el autor del disparo, admitió luego que el abogado imputado, Cristian Inostroza, les indicó que dieran una versión falsa de lo acontecido.

«Las pruebas del juicio establecen que idearon de forma previa una estrategia de ir a declarar a la Fiscalía y, en definitiva, aportaron falsos antecedentes a la investigación», senten- ció el juez Francisco Boero.

Montaje policial

En un comienzo, Carabineros negó la existencia de grabaciones tomadas por la cámara que uno de los agentes portaba en el casco y que semanas después difundieron medios locales. El vídeo muestra que Catrillanca recibió disparos de un fusil de guerra y que, tras el impacto, permaneció varios minutos inmóvil en el asiento del tractor.

Catrillanca era un comunero reconocido, nieto del lonko (jefe de la comunidad) Juan Catrillanca. Fue líder del movimiento estudiantil de la zona y participó en actos de recuperación de tierras en la comuna de Ercilla.

La controversia del caso le costó el cargo al entonces general director de Carabineros, Hermes Soto, y puso en jaque el puesto de quien era ministro de Interior, Andrés Chadwick, al que se acusó de defender la versión falsa de los hechos.

La muerte de Catrillanca fue el primer gran mazazo al Gobierno de Sebastián Piñera y empañó los planes del Ejecutivo, que poco antes había anunciado el “Acuerdo Nacional por el Desarrollo y la Paz en La Araucanía”, un polémico tratado para calmar la conflictividad en territorio mapuche (Ngulumapu).

Sin embargo, este crimen desató una escalada de tensión en el denominado «conflicto mapuche», que desde hace décadas enfrenta a algunas comunidades con empresas agrícolas y forestales que explotan las tierras ancestrales de este pueblo originario, el más numeroso en Chile, que representa cerca del 10% de la población.

Piñera mueve su Gobierno para presentar candidatos

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, ha llevado a cabo un nuevo ajuste de gabinete apenas tres semanas después del último, con cambios en la cartera de Agricultura y en la Secretaría General de la Presidencia (Segpres) de cara a las elecciones constituyentes de abril. El nuevo ajuste se produce unos días antes de que el 11 de enero venza el plazo para la inscripción de los candidatos que se quieran postular.

Se trata del séptimo ajuste que Piñera realiza en su Gobierno desde que asumió su segundo mandato no consecutivo en marzo de 2018, siendo el de octubre de 2019 el más importante, motivado por la grave ola de protestas contra la desigualdad que acababa de estallar en el país.

«El Palacio donde se fabricaban monedas ahora sirve para fabricar candidatos. Ojalá pronto vuelva a servir como verdadera casa de Gobierno», lamentó Andrea Parra, del socialdemócrata Partido Por la Democracia (PPD). El diputado comunista Boris Barrera indicó, por su parte, en Twitter que «aquí van los defensores de la Constitución pinochetista a bloquear los cambios que el pueblo quiere».GARA