Agustín GOIKOETXEA
SONDIKA
DENUNCIAS EN EL DÍA MUNDIAL DEL AGUA

Ekologistak Martxan denuncia otro foco de contaminación al río Asua

Activistas de Ekologistak Martxan denunciaron en el Día Mundial del Agua un vertido químico continuado y sin control al río Asua desde un depósito de residuos peligrosos de la empresa Asua Products, en el polígono industrial de Sangroniz, en Sondika. El colectivo criticó la «pasividad e inacción» de los distintos responsables institucionales.

Activistas de Ekologistak Martxan aprovecharon el Día Mundial del Agua para denunciar un nuevo foco de contaminación al río Asua, uno de los cauces de Euskal Herria en cuyo fondo más sustancias químicas de las industrias que proliferan en Txorierri se depositan .

Se trata de un antiguo vertedero de residuos industriales de la empresa Asua Products, en Sondika, donde se arrojaron hace unos 15 años materiales que eran empleados para la estabilización de pinturas y plásticos. Se cubrieron con unas telas especiales y tierra, que con el tiempo se han deteriorado y los lixiviados fluyen sin control.

Ekologistak Martxan quiso recordar con esta acción que el Día Mundial del Agua no se puede limitar a una jornada en la que las instituciones públicas y los políticos que las gestionan se limiten a actos simbólicos de «lavado de cara y pomposas declaraciones de autosatisfacción para que las cosas sigan igual».

«Exigimos compromisos y políticas decididas de defensa y regeneración de los ecosistemas acuáticos, a aplicar cada día en nuestros ríos. Están ya recogidas en nuestras leyes ambientales, pero hay que cumplirlas sin excusas ni demoras. Porque tomar agua nos da vida, y tomar conciencia nos dará agua», manifestaron tras la acción de denuncia en Sondika.

Los ecologistas, ataviados con buzos y mascarillas, recogieron muestras de las tierras y los lixiviados de color verduzco que fluyen sin control desde el depósito irregular, cubierto de plumero de la pampa, a los sumideros de aguas pluviales de la propia empresa química hasta el cauce del Asua. «Solo esa especie invasora puede colonizar unas tierras tan contaminadas», destacaron.

Además, llevaron a cabo un cierre perimetral provisional, a la espera de que la Viceconsejería de Medio Ambiente de Lakua y la Agencia Vasca del Agua-URA tomen cartas en el asunto. En la cinta instalada colocaron carteles en los que alertan de las sustancias que pueden contener las tierras y del «riesgo químico», en un talud junto a una de las carreteras del polígono.

Javier Vázquez, de Ekologistak Martxan, explicó a los medios de comunicación que, a primera vista, en este vertedero de Asua Products hay al menos cadmio, plomo, arsenio y polvos de cotrell. Incidió en que desde 2006, cuando al parecer se depositaron los residuos, no ha habido ningún tipo de seguimiento y medidas de seguridad o control que impidan o limiten sus afecciones medioambientales, especialmente al río.

«No podemos tener esto así. Es necesario que alguien actúe», dijo Vázquez, en referencia al estado del vertedero, exigiendo que «quien contamine, que pague. Hay que velar por la salud y el medio ambiente». Añadió que tienen constancia de que estos suelos contaminados están incluidos en un catálogo al respecto, por lo que solicitaron tal información oficial, pero todavía no han recibido ninguna comunicación.

El portavoz del colectivo denunció también la ocupación «irregular» por parte de esta compañía y de otras de la zona del dominio público hidráulico en este tramo del río. Esta ocupación de los márgenes y la canalización del Asua entre las empresas, expuso el ecologista, impide cualquier tipo de regeneración ambiental natural de sus riberas y el respeto de las «obligadas servidumbres de paso por sus orillas».

Vázquez explicó que el Asua es uno de los ríos más contaminados de Bizkaia, especialmente en su cuenca baja, lo que contribuye a la degradación ambiental del estuario del Nerbioi-Ibaizabal. «La presencia de contaminantes peligrosos como cianuro, arsénico y HCH-lindano es permanente desde hace décadas, sin que la situación tenga visos de mejorar», lamentaron desde el colectivo.

Aviso a las autoridades

Una vez concluyeron la inspección del entorno del vertedero y lo acotaron, los activistas llamaron al teléfono de emergencias 112 para comunicar la existencia del foco contaminante. Una patrulla de la Ertzaintza se acercó hasta este punto del polígono industrial de Sangroniz para verificar la denuncia. A continuación, informaron a los ecologistas de que técnicos de la Agencia Vasca del Agua-URA iban a acudir para tomar muestras y proceder a la apertura del correspondiente expediente.

El abogado Carlos Alonso anunció que tienen previsto presentar en los próximos días denuncias ante la Viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno autonómico, la Agencia Vasca del Agua y el Ayuntamiento de Sondika.

Vázquez recordó que no es el primer foco de contaminación descubierto en la zona, citando denuncias anteriores por vertidos ilegales en el antiguo vertedero del Ayuntamiento de Bilbo en Enekuri y en el alto de Santo Domingo, sin olvidar que varias empresas químicas que se ubican en los polígonos de Txorierri vierten al río Asua.

«Si en este caso tienen permisos para mantener este vertedero, están incumpliendo la ley. No se pueden tener residuos peligrosos así», reiteró el representantes de Ekologistak Martxan, exponiendo que los materiales deberían estar aislados unos de otros para que no reaccionen entre ellos. «Tendrían que estar aislados del suelo, sin posibilidad de que se filtren al agua», apostilló el activista.