Iñaki Lekuona
Profesor
AZKEN PUNTUA

Más caras

Acuatro días de las departamentales y regionales, adelantar el desconfinamiento permitiendo respirar en exteriores sin mascarilla es el último gazapo que el ministro Casteix se ha sacado de la chistera ante los augurios electorales que presagian una debacle macronista.

El golpe de efecto que se ha dejado sentir en los sondeos debía confirmarse ayer noche en las urnas a falta de la segunda vuelta de este próximo domingo. Pero en realidad, esto no es más que un test para Macron, que guarda sus cartas para la primavera del año que viene en la que se jugará repetir o no en el sillón del Elíseo.

De momento, la máscara centrista con la que trepó a él en 2017 hace ya tiempo que se le cayó, dejando sin aliento a los que creyeron en una propuesta socioliberaldemócrata que no tiene nada de social y bastante poco de demócrata. Las restricciones son tantas o más que en la era Sarkozy y la toma de decisiones es tan presidencialista o más que en la era del sarkozysmo. La última decisión del aparato estatal que preside, la de prohibir la inmersión lingüística de las lenguas minorizadas, es un claro ejemplo de lo arcaico de su pensamiento político, tan a la derecha que, con peluca rubia, Emmanuel se daría un aire a Marine. Tiene toda la pinta de que las presidenciales que vienen son las que más caras nos van a costar. Ya estamos empezando a pagar el precio; se hace difícil respirar.