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La guerra afgana enfrenta en un conflicto verbal a Kabul e Islamabad

En paralelo al avance talibán en Afganistán y a la negociación en Qatar, la guerra agudiza el conflicto entre Islamabad y Kabul, que acusa al Ejército paquistaní de apoyar a los insurgentes. El secuestro de la hija del embajador afgano en Pakistán aumentó la tensión.

A la vez que se agudizan los combates entre talibanes y las fuerzas del Gobierno afgano, se intensifica también una guerra de palabras entre Kabul e Islamabad. El Gobierno afgano acusa al Ejército paquistaní de brindar apoyo aéreo a los insur- gentes en algunas áreas, lo que Pakistán niega rotundamente.

La frontera sur de Afganistán ha sido durante mucho tiempo un punto delicado en las relaciones con su vecino.

Ayer, Pakistán reabrió temporalmente «por razones humanitarias» Chamán, un importante cruce fronterizo cerrado después de que los talibanes tomaran el control de la estratégica ciudad de Spin Boldak. Miles de afganos había quedado varados en el puesto fronterizo, donde la bandera blanca de los talibanes era visible ayer en el lado afgano. La apertura permitió a unas 4.000 personas cruzar a Afganistán para celebrar la festividad musulmana de Eid al-Adha.

En este contexto ya tenso, la hija del embajador afgano en Pakistán, Nabibulá Alijil, fue secuestrada y torturada en Islamabad por un grupo de individuos no identificados que posteriormente la dejaron en libertad. La agresión aumentó la indignación afgana, y Kabul convocó al embajador paquistaní para expresar su protesta y exigir una investigación.

Conversaciones en Doha

Por otro lado, representantes del Gobierno afgano y los talibanes se reunieron ayer en Qatar, continuando los encuentros regulares que comenzaron hace meses, pero sin avances, a la vez que los talibanes ganan terreno.

Varios altos cargos, incluido Abdullah Abdullah, jefe del Consejo de Gobierno que supervisa el proceso de paz y exjefe del Ejecutivo, participan en las negociaciones, en las que estuvo presente el enviado de Estados Unidos.

«Mientras perseguimos nuestros grandes objetivos, no debemos detenernos en los detalles», afirmó el jefe adjunto de asuntos políticos de los talibanes, Abdul Ghani Baradar, al iniciar la reunión. «Nuestra prioridad es resolver los problemas a través del diálogo», aseguró, por su parte, el portavoz talibán, Mohammed Naim.

Pero la ofensiva que lanzaron en mayo no se detiene. En ese tiempo han conquistado vastos territorios, sobre todo en el norte y oeste del país. Básicamente, las fuerzas gubernamentales solo controlan los ejes principales y las grandes ciudades, muchas de las cuales están rodeadas.