Organizaciones sociales, asociaciones de derechos humanos y partidos políticos conmemoraron ayer los 48 años del golpe de Estado que derrocó al presidente chileno Salvador Allende (1970-1973), y dio inicio a la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).

Tras marchar por calles aledañas al Palacio de La Moneda, los manifestantes depositaron ofrendas florales en la puerta de la sede presidencial y volvió a escucharse el discurso que hizo Allende antes de morir

Los participantes entonaron cánticos, consignas y destacaron el actual proceso constituyente que busca dejar atrás la Carta Fundamental heredada de la dictadura.

«Sin duda la conmemoración de estos 48 años del golpe criminal contra Salvador Allende, que truncó un proceso democrático de transformaciones profundas en el país, se da en un espacio político nuevamente conquistado por el movimiento popular a partir del 18 de octubre de 2019, que permite que hoy estemos en la posibilidad de redactar un pacto social digno», comentó la diputada del Partido Comunista Carmen Hertz.

A la vez, una multitudinaria manifestación se dirigió al Cementerio General para ofrecer su homenaje a las víctimas de la dictadura en la tumba de Allende y en el Patio 29. En el trayecto, las fuerzas especiales de la Policía militarizada chilena, Carabineros, cargaron con un camión lanza-aguas y lanza-gases contra la columna.

El golpe de Estado financiado y orquestado con apoyo de la CIA dio lugar a una dictadura que dejó a miles de personas desaparecidas, ejecutadas y torturadas, y cuyas consecuencias aún son patentes en la sociedad chilena.