D.L

EEUU y China se retan sobre Taiwán

Horas después de que el presidente Joe Biden confirmara que EEUU defenderá a Taiwán en caso de ataque de China, el Ministerio de Exteriores de Pekín rechazó compromiso alguno sobre su «integridad territorial».

China apeló ayer a la «prudencia» al inquilino de la Casa Blanca, Joe Biden, después de que el jueves por la tarde, madrugada de este viernes en Euskal Herria, confirmara que EEUU estaría dispuesto a defender militarmente a la isla de Taiwán en caso de ataque o invasión por parte del Ejército chino.

Wang Wenbin, portavoz del Ministerio chino de Exteriores, exhortó «a la parte americana a actuar con prudencia sobre la cuestión de Taiwán, y abstenerse de enviar malas señales a los independentistas taiwaneses para no deteriorar gravemente las relaciones sino-americanas».

El portavoz de Exteriores fue más allá y advirtió de que «en las cuestiones ligadas a sus intereses fundamentales, como su soberanía y su integridad territorial, China no aceptará ningún compromiso».

El presidente estadounidense hizo esas declaraciones durante un evento televisado con votantes organizado por la CNN. Preguntado por el presentador, Anderson Cooper, sobre si EEUU defendería militarmente a Taiwán si China decide invadir la isla, Biden respondió con un «sí, tenemos un compromiso».

Esta advertencia contradice la política de «ambigüedad estratégica» de EEUU en el último medio siglo, y que consiste en ayudar a Taiwán para reforzar sus defensas pero sin prometer de manera explícita que iría en su ayuda en caso de ataque.

Aunque Biden lanzó una amenaza similar en verano en la cadena ABC, cuando habló del «compromiso sagrado» para defender a sus aliados de la OTAN, Canadá y Europa, y «del mismo modo a Japón, Corea del Sur y Taiwán».

La Casa Blanca se ha visto obligada a insistir en que la política de EEUU respecto a Taiwán «no ha cambiado».

«Somos los más fuertes»

Interrogado igualmente sobre si EEUU está en condición de responder al avance de los programas militares en China, Biden alardeó asegurando que «no se preocupen de si… van a ser más fuertes. China, Rusia y el resto del mundo saben que EEUU tiene las Fuerzas Armadas más poderosas del mundo».

Todo ello no le impidió reiterar su voluntad de que Washington no se enzarce en una nueva guerra fría con Pekín.

China y EEUU se oponen frontalmente sobre muchos dosieres en un clima de guerra fría, pero la cuestión taiwanesa es la única susceptible de provocar una confrontación armada.

EEUU reconoce desde 1979 la República Popular de China, pero el Congreso mantiene el suministro de armas a Taiwán para su autodefensa.

La antigua Formosa tiene su propio gobierno tras acoger en su huida a las tropas del Kuomintang (movimiento conservador pan-chino), derrotadas por la guerrilla comunista de Mao Zedong.

Pekín reivindica la isla como una de sus provincias y le propone el estatus de «un país, dos sistemas«, imperante, y hoy en crisis, en Hong Kong. Amenaza con recurrir a la fuerza si el gobierno de Taipei, soberanista, proclamara su independencia.