AMOREBIETA 1

SANSE 2

El Sanse se reencuentra con la victoria, que se le resistía desde que ganó en Alcorcón a primeros de este larguísimo mes y que le da una mínima distancia con el descenso. El oxígeno en Lezama no alcanzaba para todos así que el salto de los txuriurdines deja boqueando al Amorebieta, que puede acabar la jornada a seis puntos de la salvación tras acabar otra vez frustrado porque su desacierto en las áreas deje sin recompensa todo lo bueno que hace sobre el verde.

Los dos equipos encararon el último partido de esta extenuante semana con cambios en el once. A ninguno se le notó e hicieron exactamente lo que se esperaba. Como, cada uno con su estilo, acostumbran a mostrar más ambición de ganar que miedo de perder, la primera media hora de partido resultó vibrante. Las ocasiones más claras, con todo, fueron casi siempre para los txuriurdines. Los balones a la espalda de la zaga local, buscando preferentemente la ruptura de Alkain, fueron una constante. En el 18, el hondarribitarra marcó así un golazo aunque fue correctamente anulado por fuera de juego. Sí valió, en el 45 recién cumplido, otro balón en profundidad, ahora para que Magunazelaia cediera a Olasagasti. El rechace de Saizar a su disparo lo convirtió Karrikaburu en el 0-1.

El partido se mantuvo igualado tras el descanso. Las ocasiones más claras fueron ahora para el equipo vizcaino, incluyendo dos remates consecutivos de Orozko al larguero en la misma acción o un buen desmarque de Olaetxea que falló picando el balón ante Ayesa. Pero Alkain también seguía a lo suyo, inquietando siempre a la defensa azul. Con razón porque en el 83, ocho minutos después de que el árbitro le perdonara la seguda amarilla, marcó el 0-2 con un golazo típico de la casa. Preciosa la asistencia de Olasagasti en la frontal y doble regate del hondarribitarra en el área antes de rematar a gol.

Se resistió a su destino el Amorebieta, pero el tiempo solo le alcanzó para que Amorrortu maquillara el marcador con un bonito gol.

Desilusión de unos, alegría de otros

«Tenemos que hacer muchas cosas bien para ganar», resumía Iñigo Vélez, que ve que a su equipo no le alcanza con trabajar y ofrecer buenas sensaciones.

«Teníamos muchas esperanzas puestas en este partido», admitió el técnico, para el que el Sanse fue «mejor en la primera parte, sin tener demasiadas ocasiones claras» pero su equipo supo reaccionar tras el descanso pese al varapalo del gol en el 45. «El equipo vuelve a salir con las ideas claras pero no conseguimos marcar», lamenta Iñigo, consciente de que ahora mismo «no nos da para ganar».

La otra cara de la moneda le correspondía a Xabi Alonso, feliz no tanto por las consecuencias del triunfo en la tabla porque «todavía queda mucha temporada», sino porque «estos tres puntos nos dan mucha confianza para seguir adelante. También destacó las «buenas sensaciones» en un partido en el que «en general hemos recibido poco y hemos generado ocasiones». A.U.L.