EIBAR 0

FUENLABRADA 0

El Eibar sufre un frenazo sin consecuencias demasiado graves. No pudo pasar del empate ante el segundo peor visitante de la categoría pero mantiene el liderato, con un punto de ventaja ahora sobre el Almería y los mismos cuatro que ya tenía sobre el Valladolid.

Lo más fácil sería recurrir a la ausencia de Stoichkov, máximo goleador, y Tejero, máximos asistente y con otros tres tantos en su cuenta, para explicar la falta de puntería de un equipo que solo se había quedado sin marcar en otros cinco partidos. Pero, salvo en Zaragoza donde faltó el lateral, en todos ellos habían partido los dos futbolistas en el once titular. Quizá tenga más que ver con las características de un Fuenlabrada que, aun con otro entrenador en el banquillo, también secó al Eibar en el partido de la primera vuelta, que acabó con el mismo marcador que el de ayer.

En el Fernando Torres quedó la sensación de que los eibarreses no merecieron mucho más. Y en Ipurua también. Porque el Eibar –con la previsible entrada de Correa y Leschuk en el once como única novedad– empezó y acabó mejor. O al menos generando más peligro, dos remates de Leschuk en el arranque del partido y una falta de Aketxe en la recta final. Pero en el durante chocó con la seriedad defensiva del Fuenlabrada, que apenas le permitió opciones, más allá del balón parado y los remates desde fuera del área.

Peor aún, el equipo madrileño tuvo sus momentos, en los que bien pudo haber inclinado el partido de su lado, con protagonismo especial para Pedro León que, como había hecho antes Leschuk, incluso estrelló un balón en la madera. Pero se hizo justicia y tampoco el Fuenlabrada acertó.