Dabid LAZKANOITURBURU

Rusia sigue jugando con los nervios de Estados Unidos y de Occidente en Ucrania

Después de anunciar un nuevo repliegue de sus contingentes cerca de la frontera con Ucrania, el Ejército ruso inició nuevas maniobras navales, esta vez en el mar Caspio. Moscú juega con los nervios de EEUU, que asegura que Putin sigue acumulando tropas en la región.

Rusia aseguró ayer que nuevas unidades blindadas del Distrito Militar Oeste empezaron a retirarse de una zona cercana a la frontera con Ucrania para volver a sus cuarteles. El Ministerio ruso de Defensa ruso señaló que estas unidades blindadas «han empezado a moverse hacia su punto de despliegue permanente tras completar los ejercicios planificados en las zonas de entrenamiento». Si bien no especificó su destino, resaltó que se trasladarán a unos 1.000 kilómetros.

Paralelamente, anunció que una veintena de buques de guerra iniciaron maniobras en el mar Caspio tras zarpar del puerto de Majachkala, en el Cáucaso Norte. En los ejercicios participan una fragata, seis corbetas, lanchas artilladas y detectores de minas.

Durante los últimos días, Rusia ha anunciado el repliegue de fuerzas de la zona fronteriza con Ucrania, incluida la península de Crimea, si bien Estados Unidos se ha mostrado escéptico. De hecho, un alto cargo estadounidense afirmó el miércoles que el número de tropas habrían aumentado en 7.000 en las últimas jornadas.

El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, insistió ayer ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en los supuestos planes rusos para justificar y lanzar una inminente invasión de Ucrania, que incluiría la toma de Kiev, unas acusaciones que Moscú consideró infundadas y peligrosas.