Gloria Rekarte
Expresa
AZKEN PUNTUA

El tablado

Una mujer de 47 años, madre de seis hijos y con discapacidad visual, fue asesinada cuando varios soldados le dispararon a bocajarro en plena calle. No se intranquilicen: era de piel oscura y llevaba ropas largas y holgadas; no era «como nosotros» y nunca hubiera sido portada de “Vogue”. Se llamaba Ghada Sabateen y solo era una mujer palestina, una de las dos que fueron asesinadas, a sangre fría, el pasado domingo, en una tierra continuamente invadida en la que la muerte nunca es noticia.

Con mucha tristeza recordé a Gabriel Boric, explicando en su cuenta de Twitter, su voto a favor de la expulsión de Rusia del Consejo de DDHH de la ONU: «Es lo que moralmente corresponde». Mentira. Políticamente, será, y cada cual sabrá a qué o a quién se debe y por qué. Pero moralmente, no. Moralmente, lo que corresponde es cerrar la boca a cualquier país que pretenda tener autoridad para hablar de derechos humanos mientras hace de su violación un derecho exclusivo. Lo contrario es dar luz verde al genocidio, la ocupación, las invasiones, las ejecuciones… Y lo que ahora ha venido a decir la Asamblea General de la ONU es que Israel, EEUU, Arabia Saudita… pueden seguir con lo suyo, sin pena, ni sanciones, porque el Consejo de DDHH es poco más que un tablado para un baile de alianzas. No sé si es Rusia, precisamente, la que ha salido perdiendo.