Miles de palestinos se despidieron ayer en Jerusalén de la periodista Shireen Abu Akleh, quien el miércoles recibió un disparo en la cabeza cuando cubría una incursión militar israelí en Cisjordania.

Las fuerzas israelíes llevaron la represión hasta el propio cortejo fúnebre, aporrearon a los portadores del féretro nada más salir del Hospital Francés de San Luis, y arrojaron bombas de sonido y balas de goma dentro del recinto, que amenazaron con asaltar. La Media Luna Roja informó de decenas de heridos por la carga policial.

La agresión a los portadores del féretro hizo que el ataúd estuviera a punto de caer al suelo.

Fuentes israelíes lo justificaron aduciendo que las condiciones para celebrar el funeral eran que no fuera trasladado a pie. También había prohibido banderas y cánticos.

Finalmente, el féretro fue trasladado en coche fúnebre hasta la Catedral de la Anunciación de la Virgen, pero la violencia contra el cortejo continuó y los policías también quitaron las banderas palestinas del automóvil y detuvieron a cuatro personas. La Policía llegó a romper una de las ventanas del coche para retirar otra bandera en su interior.

Después de que la familia enterrara a la periodista en un cementerio de la Ciudad Vieja, la Policía siguió atacando a la multitud lanzando gases lacrimógenos. Las fuerzas israelíes ya habían actuado contra la procesión fúnebre de la víspera, cuando llegaron a registrar la ambulancia que transportaba el ataúd y confiscar el chal de la periodista manchado con su sangre. La reportera de televisión de Al Jazeera, muy popular en Palestina y el mundo árabe, recibió un disparo mortal en la cabeza mientras cubría una incursión israelí en el campo de refugiados de Jenin, a pesar de ir perfectamente identificada.

Israel, tras decir que «probablemente» había sucumbido al fuego palestino, aseguró que era imposible saber de dónde procedía la bala y finalmente dijo que no descartaba que fuera disparada por sus soldados. La Autoridad Palestina, que al igual que Al Jazeera y Qatar, no duda de la autoría israelí, rechaza entregar la bala a las autoridades israelíes, porque desconfían de quienes cometieron el crimen para que lo investiguen.

La imagen de la periodista se exhibió en protestas en Turquía, Sudán y Líbano, entre otros lugares, así como en murales en Gaza y Cisjordania.

Israeli Zisjordanian etxerik ez eraikitzeko eskatu diote

Europako hamabost estatuk Zisjordanian 4.000 etxebizitza baino gehiago eraikitzeko proiektuan atzera egiteko eskatu diote Israeli, frantziar Atzerri Ministerioak zabaldutako adierazpen batean. Sinatzaileek Israelgo Plangintza Batzorde Nagusiak hartutako erabakiarekin «oso kezkatuta» daudela esan zuten. Etxebizitza horiek eraikitzea «oztopo handiagoa izango litzateke bi estaturen irtenbidea gauzatzeko», gaineratzen du Estatu frantses, Estatu espainol, Alemania, Italia, Belgika, Danimarka, Finlandia, Grezia, Irlanda, Herbehere, Norvegia, Suedia, Luxenburgo, Malta eta Poloniako Atzerri ministerioek sinatutako agiriak. Gogorarazten dutenez, lurralde okupatuetako kolonia israeldarrak «nazioarteko zuzenbidea urratzen ari dira argi eta garbi», eta oztopo dira «bake justu, global eta iraunkorra» lortzeko. Gainera, erabakiak «palestinarren etxebizitzen eraispenekin eta etxegabetzeekin bat egiten du eta zuzenean mehatxatzen du etorkizuneko Palestinako Estatua bideragarria izatea». GARA