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Cien días encarcelado en Polonia con «el beneplácito del Gobierno español»

Un vídeo publicado por familiares y amigos de Pablo González denuncia que el periodista vasco lleva cien días detenido en Polonia que «podrían ser tan solo los primeros de muchos más». Todo ello «con el beneplácito del Gobierno de España», afirman, que ha tolerado la vulneración de 18 artículos de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE.

Ayer se cumplieron cien días desde que el periodista vasco Pablo González fue detenido en Polonia cuando cubría los efectos de la invasión rusa de Ucrania en la frontera de este país con Polonia.

Acusado por las autoridades polacas de «espionaje», fue encarcelado e incomunicado durante semanas, sin acceso a abogados de confianza. El pasado mayo los jueces decidieron prorrogar el encarcelamiento.

«Son más de tres meses en los que ha perdido mucho más que su libertad: su vida privada y su prestigio como profesional. 100 días sin saber de sus hijos, sin poder trabajar, sin poder defenderse. Cien días de incomunicación, de insinuaciones, imprecisiones... En definitiva, cien días perdidos que nadie le va a poder devolver», denunciaron sus familiares y amigos, que han publicado un vídeo al cumplirse estos cien días, en el que se preguntan «qué va a ser de él cuando todo esto acabe».

«¿Podrá volver a ejercer su profesión? ¿Confiarán en él los medios para los que ha trabajado hasta ahora? ¿Quién le devolverá su credibilidad periodística?», preguntan. Y lamentan que «la herida emocional y profesional que le está causando esta situación tardará mucho tiempo en cerrarse».

Además, alertan de que estos cien días «podrían ser tan solo los primeros de muchos más privados de libertad». No en vano, «la semana pasada, el abogado polaco que le representa desde finales de abril recurrió la prórroga de prisión provisional y la imposibilidad de comunicarse con su familia, pero todo indica que la situación va a continuar igual».

«Y todo ello con el beneplácito del Gobierno de España, que más allá de las tres visitas consulares ha seguido poniéndose de perfil, permitiendo a Polonia vulnerar hasta 18 artículos de la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea».

Consideran «aún más flagrante que haya contribuido a sembrar más dudas sobre Pablo, sin que hasta la fecha hayan trascendido pruebas incriminatorias que no fueran circunstanciales y que ya fueron aclaradas en su momento».

La iniciativa FreePablo tiene por objeto «seguir haciendo ruido» para que el caso de Pablo González no caiga en el olvido. «Todos los apoyos son necesarios para que los medios de comunicación y los políticos se hagan eco de su situación», apuntan. Hasta ayer se había recogido cerca de 41.000 firmas en las plataformas Change.org y Osoigo.com.

Fuertes combates en una fase decisiva en Severodonetsk

Las combates en Severodonetsk, bastión clave para el control de la región de Lugansk, que en un 97% está ya en manos rusas, entran en una fase decisiva con gran concentración de tropas por ambos bandos. Moscú anunció el control las áreas residenciales de la ciudad, donde permanecen aún unos 10.000 habitantes, a pesar de que Kiev aseguraba haber parado el avance ruso. Los combates se centraban en la zona industrial y localidades adyacentes. El aeropuerto y la planta industrial de Azot es el bastión que queda a las tropas ucranianas. El abogado de Dmytro Firtach, propietario de esta fábrica química, aseguró que 800 civiles se han refugiado en ella. Pese a todo, el Gobierno ucraniano asegura resistir calle por calle con fuertes pérdidas en ambos bandos. La toma de Severodonetsk puede abrir una fase de estancamiento de la guerra que Kiev quiere evitar. Para ello, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, sigue pidiendo más armas, con el fin de lograr una victoria en el campo de batalla antes de cualquier negociación.GARA