GARA
RABAT

Cinco muertos en el primer salto a Melilla tras el pacto Madrid-Rabat

Al menos cinco personas migrantes murieron ayer durante un salto a la valla de Melilla desde territorio marroquí, en la primera acción de este tipo registrada desde que el Gobierno de Pedro Sánchez cambiara la posición del Estado español sobre el Sahara Occidental y apoyara el plan de autonomía marroquí, abriendo una nueva etapa en las relaciones entre Madrid y Rabat. Se registraron 76 heridos, 13 de ellos de gravedad, y 130 personas de origen subsahariano lograron cruzar.

En el salto participaron unas dos mil personas a pesar del «amplio» dispositivo de las fuerzas de seguridad marroquíes, que colaboraron «activamente y de forma coordinada con las españolas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado».

Más de un millar de agentes fueron desplazados de urgencia desde otras zonas de Marruecos y los policías de ambos lados se emplearon con contundencia para intentar evitar que los migrantes cruzaran a territorio español. Los graves enfrentamientos entre quienes pretendían avanzar y los policías que les cortaban el paso se saldaron con, al menos, cinco personas muertas durante una estampida, según la versión oficial. Las personas que lograron cruzar se dirigieron al Centro de Estancia Temporal de Melilla (CETI), algunas de ellas heridas.

Sánchez agradeció desde Bruselas la «extraordinaria cooperación» con Rabat. «La Gendarmería marroquí se ha empleado a fondo en tratar de evitar este asalto violento, bien organizado, bien perpetrado y bien resuelto por parte de los dos cuerpos de seguridad», aseguró.