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KIEV

Zelensky cesa a la fiscal general y al jefe de la SBU por «alta traición»

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha destituido al jefe de Inteligencia (SBU), Ivan Bakanov, y a la fiscal general, Irina Vendiktova, entre acusaciones de «alta traición» y de colaboración con los rusos. Unos 650 funcionarios están siendo investigados.

Volodymyr Zelensky, en una comparecencia en Kiev.
Volodymyr Zelensky, en una comparecencia en Kiev. (S. SUPINSKY | AFP)

Volodymyr Zelensky destituyó el domingo por la noche con efecto inmediato al jefe del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), Ivan Bakanov, y a la fiscal general, Irina Venediktova. De acuerdo con el decreto publicado en la web de la Presidencia de Ucrania, Bakalov fue destituido de conformidad con el Artículo 47 del Estatuto Disciplinario de las Fuerzas Armadas, que alude a la «falta de desempeño (o desempeño inadecuado) de deberes de servicio con el consiguiente coste de vidas humanas».

Entre las razones de esta acusación se especulaba con las decisiones adoptadas al comienzo de la invasión de Rusia, sobre todo la rendición de Jerson, la ciudad rápidamente tomada por las tropas rusas y la negativa a volar uno de los puentes sobre el río Dnipro para impedirlo.

Bakalov era miembro del círculo de amistades más íntimas del presidente, quien se distanció de él, según el portal de noticias estadounidense Politico, tras la caída de Jerson.

Por su parte, la fiscal fue cesada en virtud de los poderes de guerra asumidos por Zelensky tras la invasión rusa del país, sin dar más detalles.

Zelensky informó de que se han abierto 651 procesos penales por «alta traición e inteligencia con el enemigo» contra funcionarios de la Fiscalía General y la SBU.

«No pinta bien»

Mientras Turquía sigue mediando entre Rusia y Ucrania, su presidente, Recep Tayyip Erdogan, sugirió que podría vetar la adhesión de Suecia a la OTAN al señalar que no está actuando como espera que lo haga Ankara para ratificar su ingreso, que, insistió, sigue estando «condicionado». Reiteró que «si Suecia y Finlandia no dan los pasos necesarios para cumplir nuestras condiciones, congelaremos el proceso», y agregó que «especialmente Suecia no pinta bien». Turquía exige extradiciones de activistas kurdos y de supuestos seguidores del clérigo Fetulah Gülen acusados de «terrorismo», pero también que sus aliados acepten la operación militar anunciada contra el autogobierno kurdo en Rojava.

Por otro lado, la UE aprobó ayer otros 500 millones de euros para financiar armas para Ucrania y los ministros de Exteriores estudiaban los detalles de un séptimo paquete de sanciones a Rusia que evita el sector energético.