Iker ZURRO
Periodista
KOLABORAZIOA

Girar

Dejando al margen su significado económico y comercial, girar, en su forma verbal transitiva, es hacer que algo dé vueltas y, en la forma intransitiva, es dar vueltas una cosa alrededor de sí misma o de otra cosa, por lo tanto y resumiendo, girar es dar vueltas. Y si esa cosa es una persona, ¿hasta cuándo puede girar o dar vueltas? Alguno dirá qué hasta que mareado te desplomes dándote de bruces sobre el suelo, a no ser que seas un derviche y busques alcanzar el éxtasis religioso mediante danzas giratorias.

A mediados de julio los medios de comunicación de la corte madrileña publicaban alarmantes titulares sobre el peligroso giro a la izquierda que el presidente del Gobierno Pedro Sánchez realizó en el Congreso durante el debate del estado de la nación (española, por supuesto). Quizás para calmar a esos medios, el presidente del Gobierno y secretario general del partido socialista le ha dado una vuelta al fondo de armario para colocar como portavoz del grupo parlamentario a Francisco Javier López Álvarez, aquí conocido como Pachi, quién lleva ocupando cargos orgánicos e institucionales desde 1985. Tal vez su toque de atención a Felipe González, al que recomendó la lectura integra de la Ley de Memoria Democrática, le granjeara la simpatía del presidente y secretario general para auparlo como portavoz del grupo parlamentario socialista, o puede que sea el recuerdo de conseguir el apoyo del PP para obtener la investidura como lehendakari de casi todos los vascos por aquello de la geometría variable.

En las elecciones al Parlamento Vasco de 2009 con Juan José Ibarretxe como candidato a la Lehendakaritza, los jeltzales aventajaron en cinco escaños y 80.000 votos al candidato socialista, 30 a 25, pero este, desdiciéndose de sus declaraciones del día anterior, ocupó el sillón de lehendakari gracias a los trece apoyos del PP y, sobre todo, gracias a la ilegalización que desde 2003 iniciaría un periodo de «apartheid» político de la izquierda abertzale. En sus primeras navidades como lehendakari, Pachi López aseguraba ante medios del grupo Vocento que el PP se ajusta a lo que representa una «derecha europea y civilizada». Comparándolo con su predecesor en el cargo, Pachi López logró en su gestión como lehendakari un menor rendimiento, más costoso, de peor calidad y aumentar el déficit del Gobierno Vasco.

Y el pacto imposible PSOE-PP en cualquier parte del Estado español fue posible, como no, en territorio vasco; el sur de Euskal Herria parece terreno abonado para cualquier ensayo represivo, incluido ilegalizar candidaturas ciudadanas que pretendieran paliar la falta de representatividad institucional de una parte considerable del electorado vasco.

A la portavocía en el Congreso se suma el nombramiento como portavoz de la Ejecutiva del partido socialista de la ministra de Educación Pilar Alegría, perteneciente a la federación aragonesa del PSOE que preside otro Francisco Javier, Lambán en este caso. Esperemos que la obsesión contra el soberanismo de la que hace gala este último no sea la misma para la nueva portavoz del partido socialista. También se ha incorporado como vicesecretaria general la ministra de Hacienda María Jesús Montero.

Desde que un tren inicia el recorrido realiza múltiples giros hasta que llega a su destino. Esperemos que Pachi no se pierda en otro tren y que el maquinista no sea un licenciado en Filosofía como su tocayo, sino un conductor que finalice profesionalmente su periplo para la tranquilidad de sus pasajeros. No hay que darle más vueltas.