Natxo MATXIN
ATHLETIC

El buen momento de los Williams impulsa el tercer triunfo seguido

Un intenso equipo rojiblanco desarboló por completo a un Almería que dio muchas facilidades en defensa y que fue superado por el poder ofensivo local, plasmado en una pareja de hermanos que están de dulce y que se entendieron a la perfección en ataque.

Iñaki señala y agradece a su hermano Nico la asistencia en el 1-0.
Iñaki señala y agradece a su hermano Nico la asistencia en el 1-0. (Monika DEL VALLE | FOKU)

Impulsado por el gran momento de los Williams, un intenso Athletic ha dormido en puestos de Champions después de vapulear a un Almería muy frágil en defensa y encadenar su tercera victoria consecutiva. Las gradas de San Mamés disfrutaron con su equipo, que desplegó un gran poderío físico.

El peligroso toma y daca inicial se cortó de cuajo al cumplirse los diez primeros minutos, gracias al fraternal 1-0. Nico sirvió un centro aterciopelado con la zurda e Iñaki se encargó de peinarlo entre la cabeza y el hombro lejos de los dominios de Fernando.

Un gol que premió el esfuerzo desplegado por el Athletic para robar tras pérdida y hacerlo además lo más cerca posible del área almeriense. Lejos de conformarse con ir por delante en el luminoso, los de Ernesto Valverde no quitaron el pie del acelerador y siguieron hurgando en el desconcierto visitante hasta lograr la segunda diana.

Otra recuperación tras saque de banda andaluz acabó en las botas de De Marcos, que dio un pase vertical preciso a la entrada en ruptura de Sancet, cuyo control fue medio tanto, para fusilar y superar de nuevo al meta murciano.

Y aún tuvieron tiempo los locales antes del descanso para firmar más acometidas, como una chilena muy complicada de Berenguer en el 38. A destacar que el despliegue físico del Athletic no solo le dio para acogotar al Almería en su campo, también para replegarse con mucha rapidez cuando hizo falta, evitando gran parte de la peligrosidad de las contras de los pupilos de Rubí.

VAR Y TERCERO

La segunda parte transcurrió por los mismos derroteros. Por mílimetros, el VAR le negó el 3-0, y el segundo en su cuenta particular, a Iñaki Williams en el 50. Se resarció el mayor de la familia doce minutos después cuando le devolvió la asistencia a Nico, quien tuvo la recompensa a su pelea ante un frágil Ely, esta vez sí subiendo al marcador.

El Athletic siguió a lo suyo, sin bajar un ápice la intensidad, mientras que, con triple desventaja en el electrónico, los múltiples cambios del preparador visitante sí que permitieron que el Almería enseñase algo los dientes, mediante sendas acciones de Embarba y Kaiky, pero que no encontraron portería.

Sí que lo hicieron los leones, al sufrir Vesga un penalti y transformarlo el propio centrocampista gasteiztarra en el minuto 83 para redondear una noche mágica del conjunto vizcaino. El exigente calendario que se le viene ahora encima al bloque de Valverde permitirá comprobar si el gran momento de forma del equipo le da para codearse con rivales que van a pugnar por los puestos cabeceros.