Rishi Sunak asumió ayer el cargo de primer ministro británico, el quinto desde el Brexit y el tercero en dos meses, después de recibir del rey Carlos III el encargo para formar Gobierno y con la promesa de recuperar la estabilidad económica y de corregir los «errores» de las administraciones precedentes, en velada referencia a la de Liz Truss, que tuvo que abandonar Downing Street tras la reacción provocada por su plan de recorte masivo de impuestos.

El exbanquero y exministro de Finanzas se convierte en el primer jefe de Gobierno británico de origen indio, de fe hindú y de una antigua colonia.

Tras reunirse con el rey, llegó bajo los abucheos de algunos manifestantes a las puertas de Downing Street para su primer discurso. Prometió estabilidad económica y recuperar la confianza de los votantes y la unidad del país gracias a su profesionalidad, integridad y responsabilidad. «Se cometieron errores. Fui elegido para rectificarlos», dijo.

No obstante, alabó la determinación de Truss para mejorar el crecimiento del país, sumido en una grave crisis económica y social. Y advirtió de que deberá tomar «decisiones difíciles».

Su primera gran prueba la asumirá el 31 de octubre, cuando el Gobierno presente su plan fiscal a medio plazo para equilibrar las finanzas públicas.

Apuesta por la estabilidad

Sunak nombró ayer un gabinete de ministros representativo de varias facciones del Partido Conservador, con pocas mujeres en las principales carteras y algunos aliados en puestos clave.

En una apuesta por la estabilidad, mantuvo a Jeremy Hunt, del antiguo bando contrario al Brexit, como ministro de Finanzas. Perteneciente a la facción pro-Brexit, Sunak designó como vice primer ministro y titular de Justicia a su aliado en las primarias Dominic Raab.

Al Ministerio de Interior vuelve Suella Braverman, del ala derechista de los tories, eurófoba y antiinmigración, quien dimitió hace una semana. Además, mantiene a James Cleverly al frente de Exteriores y a Ben Wallace en Defensa, en tanto que Grant Shapps ocupa el Ministerio de Empresa.

Nadhim Zahawi, que tuvo cargos en los gobiernos de Johnson y Truss, se convierte en presidente del Partido Conservador y ministro sin cartera.