El Buesa Arena fue ayer testigo de la lucha por el liderato definitivo de la Fase Regular de la Liga ACB, con el goloso premio de disponer del factor cancha en los play-offs. Por desgracia, eso no va a poder ser, ya que un gran Barça se impuso después de un partidazo, con jugadores como Abrines y Laprovittola siendo superiores a un Baskonia que nunca se rindió, pero que fue perdiendo el acierto y el control del rebote.

Ahora habrá que asegurar la segunda plaza. En estos momentos, los gasteiztarras suman 27 triunfos, igual que el Real Madrid, aunque el average lo tienen los alaveses. Con ganar en el pabellón Fontajau a un Bàsquet Girona que el sábado en Zaragoza certificó su salvación, basta para acabar segundos. El liderato no podrá ser, mientras que el Barça sigue siendo un obstáculo insalvable para este Baskonia.

El duelo arrancaba muy parejo, con Marinkovic -que entró en lugar de Enoch- y Darius Thompson tirando del carro anotador en el bando local, al tiempo que Nikola Mirotic le arrancaba dos faltas rápidas a Daulton Hommes. El de Podgorica, una vez más, fue el principal baluarte de puntos del Barça en el inicio, y más con la facilidad con la que se cobra faltas y viaja a la línea de tiros libres.

La igualdad fue la nota predominante, sobre todo porque el Barça procuró cuanto pudo que Howard no entrara en juego, con defensores que asumieron su «guarda y custodia» cara a cara, aunque los de Peñarroya demostraron tener recursos de sobra para afrontar estas eventualidades.

Luego del empate a 45 al descanso, no se reservaron nada los dos equipos en la reanudación, jalonado por un puntual acierto absolutamente apabullante y admirable. Un matazo de Hommes y la racha anotadora de Marinkovic fueron los encestes más destacados del Baskonia, en perfecta réplica al trance triplista de Laprovittola y Abrines por parte culé: 59-58 tras dos tiros libres de Darius Thompson.

Pero ahí se quebró el duelo. Una técnica a Joan Peñarroya sobre un triple de Laprovittola sacó de sus casillas al Baskonia, que cerró el tercer asalto con un 64-73 en contra. Al acierto de Laprovittola y Abrines se le sumó un Sanli muy fino desde la media y larga distancia, al tiempo que con la dirección de Max Heidegger, los gasteiztarras perdieron la finura de los minutos previos.

Así pues, a remar otra vez en los diez minutos finales. Pero en ese remar, el Barça supo mantenerse arriba, aun cuando Saski Baskonia se arrimó 82-86. Tomas Satoransky anduvo fino en los instantes finales, mientras que un desquiciado Markus Howard erró dos tiros libres con escasos segundos para el final. El liderato se ha ido para siempre.

PEREZA DOMINICAL

En lo que respecta a Surne Bilbao Basket, tuvo un partido malo y desgraciado en el feudo de UCAM Murcia. Ya desde el 18-7 con el que acabó el primer cuarto, las cosas se le torcieron absolutamente frente al cuadro pimentonero. Vanos fueron los intentos de reacción del cuadro bilbaino, porque careció de la consistencia precisa, al punto de que los pupilos de Sito Alonso se impusieron por 67-55.

Lo peor, en todo caso, llegó en el apartado de las lesiones. A las ausencias ya conocidas de Hakanson, Denzel Andersson y Francis Alonso se les unieron las de Nikola Radicevic, con un golpe en la rodilla y la de Agustín Ubal, este con un problema en el tobillo derecho, luego de haber llegado al partido de ayer con problemas en la fascia plantar. Tal fue la precariedad en la línea exterior bilbaina, que hasta Xavi Rabaseda tuvo minutos ejerciendo de base.