Los enfrentamientos entre el Ejército sudanés y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) se recrudecieron ayer en Jartum con bombardeos aéreos y ataques contra varias sedes gubernamentales, en combates que se desarrollan ininterrumpidamente desde el 15 de abril, a pesar de varias treguas acordadas. La capital y las ciudades adyacentes de Jartum Norte y Umdurman fueron escenarios de intensos bombardeos del Ejército y disparos de artillería de las FAR. Entre los edificios atacados se encuentra el de la Corporación de Radio y Televisión sudanesa, disputado por ambas partes desde los primeros días del conflicto.

Varias embajadas extranjeras también fueron atacadas y saqueadas por las FAR, la última de ellas la de Qatar, cuyo personal diplomático, como el de otras legaciones, había sido evacuado al estallar el conflicto.

En la región de Darfur, donde los enfrentamientos han derivado en batallas de tintes sectarios, el Ejército ha emprendido una gran campaña en uno de los principales bastiones de las FAR.

Por su parte, el recién nombrado vicepresidente del Consejo Soberano sudanés y exlíder rebelde, Malek Aqar, urgió a las FAR a integrarse dentro de las Fuerzas Armadas como única solución para poner fin al conflicto.