Manu Lezertua compareció ayer en la Comisión de Derechos Humanos, Igualdad y Justicia del Parlamento de Gasteiz para presentar el informe anual 2022 de Ararteko. Reveló que recibieron varias quejas contra la Ertzaintza y también contra algunas policías locales por no tramitar denuncias por violencia de género o por tratar a las denunciantes de manera inapropiada, actitudes que Lezertua consideró «especialmente graves».

Durante su comparecencia, recordó que la Ley de Enjuiciamiento Criminal «es muy clara» y recoge que «no se puede rechazar una denuncia, salvo en casos muy tasados».

«Hemos encontrado comportamientos, no solo en la Ertzaintza, también en algunas policías municipales, que dicen: ¿Está seguro que quiere poner la denuncia? Yo creo que no es una buena idea», indicó. Afirmó que «este tipo de actitudes, el ararteko las tiene que criticar, porque son contra la ley». Destacó que considera «especialmente grave» las relacionadas con las denuncias de violencia de género.

«Habría que tener una receptividad y una sensibilidad enorme, que es lo que ha dicho Ararteko que hay que tener. Desgraciadamente hemos encontrado algún caso en el que nos ha parecido que la que respuesta de la Ertzaintza a la hora de recibir esas denuncias no ha sido apropiada y la hemos tenido que reflejar así», insistió después de que le interpelara el parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga.

NO ES UN CASO AISLADO

Al respecto, Lezertua citó un caso ocurrido en la comisaría de la Ertzaintza de Gasteiz, con resolución de febrero de este año. «El tema se agravaba porque era una agresión sexual a una menor», que «era evidente que si había habido algún tipo de agresión sexual a una menor era delito».

«En este caso, al parecer, el comportamiento del que fue objeto esa denunciante, con sus padres, además, no fue todo lo adecuado que tenía que haber sido y se formularon consideraciones que, a nuestro juicio, eran improcedentes, y así lo dijimos en nuestra resolución», rememoró.

El caso de Gasteiz no es el único. Ararteko abrió otro expediente en marzo por el trato policial que una mujer recibió en las comisarías bilbainas de Zabalburu y Deustu cuando fue a denunciar que había sufrido una agresión sexual. La mujer denunció que, sin respetar su privacidad, los agentes en Zabalburu le atendieron en la sala de espera de la comisaría, donde había más ciudadanos y puso de manifiesto la actitud «muy hostil y violenta» de los policías. El Departamento de Seguridad de Lakua, según denuncia Ararteko en el expediente, no facilitó la documentación necesaria para aclarar lo sucedido.

De hecho, el Departamento dirigido por Josu Erkoreka sabe de estos comportamientos, pues en los últimos tres años ha abiertos sendos expedientes a agentes de Gernika, Basauri e Irun.

Los expedientados en las comisarías de Gernika e Irun no recibieron sanción. En el primer caso, una mujer acudió a la comisaría acompañada de su hermana y su padre para interponer una denuncia contra su expareja por violencia de género. El agente realizó «varios comentarios inadecuados» y en un principio no tramitó una orden de protección para la víctima porque «no se cumplía el tipo y no había lesiones».

En Irun, un agente atendió a una mujer que quería denunciar a su marido -llevaba la denuncia por escrito- con preguntas fuera de lugar; por ejemplo, si seguía queriendo a su marido. Después, le dijo que no iba a recoger la denuncia ese día porque «se tenía que marchar».

En el caso de Basauri, el expediente determina la «falta grave» de un ertzaina que «incumplió sus obligaciones profesionales» cuando una mujer fue a denunciar una agresión sexual. El agente ni siquiera identificó a la denunciante.

Además, de estos casos Julen Arzuaga señaló que EH Bildu tiene constancia de dos denuncias más interpuestas en Ondarroa.

Durante su comparecencia en la comisión, Lezertua contestó a EH Bildu que no han recibido aclaraciones por parte del Departamento de Seguridad sobre el trato policial a la ciudadanía como anunció el consejero Josu Erkoreka en sede parlamentaria. El ararteko realizó la petición el martes después de la denuncia de la mujer del trato hostil de los policías en las dos comisarías de Bilbo.

SIN RESPUESTA DE LAKUA

«Lamento decirle que no es así. Me hubiera gustado, porque además tenemos noticia de que algunas medidas se están tomando para evitar estas situaciones en materia de recepción de denuncias, sobre todo por violencia de género», contestó a Lezertua.

Señaló que aunque conocen que «algunas medidas se están tomando» no saben «cuáles», y no han recibido respuesta por parte de Seguridad. «Hemos señalado ya al Departamento que consideramos el silencio como la no aceptación de las recomendaciones que formulamos en su día», subrayó.

El pasado mes de marzo el ararteko pidió a Lakua que la Ertzaintza facilitara la presentación de denuncias por agresión sexual tras el trato indebido dispensado a una menor de 15 años y sus padres. Semanas después, Erkoreka le criticó por «asumir» la versión de la víctima y acusar «de forma general» a la Ertzaintza.

FALTA DE COLABORACIÓN

El ararteko rechazó que algunas administraciones han «descuidado su colaboración con Ararteko y no han mantenido el pulso adecuado» en sus relaciones con la Defensoría del Pueblo.

«Ha apreciado, con preocupación, una progresiva falta de atención en el plazo de respuesta a las peticiones de información en los expedientes de queja», indicó Lezertua en comisión parlamentaria.