Natxo MATXIN
TOUR DE FEMMES 2023

Kastelijn da a Fenix un triunfo histórico, el primero de un equipo Continental

La neerlandesa fue la mejor de una numerosa fuga -llegó a tener diez minutos de ventaja- en la etapa más larga de la presente edición -177,1 kilómetros-, jornada que sirvió para desatar de manera pública las desavenencias entre Vollering y Van Vleuten.

Yara Kastelijn explota de alegría al entrar en Rodez, el triunfo más importante de su carrera.
Yara Kastelijn explota de alegría al entrar en Rodez, el triunfo más importante de su carrera. (J. PACHOUD | AFP)

A sus 25 años, Yara Kastelijn consiguió en el último muro de Rodez el triunfo más importante de su carrera deportiva, además de histórico, al hacerlo para el Fenix Deceu- ninck, el primer equipo continental que vence en la historia del Tour de Femmes, que cumple su segundo año de andadura. La ciclista neerlandesa fue la más fuerte de la numerosa escapada y lo demostró en las ascensiones de Moyrazes y Lavernhe.

La cuarta etapa, la más larga de esta edición, con 177,1 kilómetros, destapó definitivamente la rivalidad entre las dos favoritas a hacerse con el triunfo final, Demi Vollering y Annemiek Van Vleuten. La de SD Worx logró sacarle varios segundos de ventaja a la campeona del mundo tras sumar los seis de bonificación al entrar en segunda posición, además de otros dos al abrir un pequeño hueco añadido.

Fue una jornada atípica. Junto a la inusual longitud del recorrido hubo que añadirle otro factor poco común, una fuga numerosa con una renta más que importante, suficiente a la postre para la victoria de Kastelijn. Hasta catorce corredoras se metieron en una fuga que acumuló hasta diez minutos de ventaja sobre un pelotón que se lo tomó con mucha parsimonia hasta que faltaron 50 kilómetros para la línea de meta.

No son pocos los equipos que vienen criticando la actitud de SD Worx por no llevar la iniciativa y el mando en el gran grupo, pero esa estrategia le está saliendo a las mil maravillas al conjunto neerlandés, que ahora tiene a sus dos primeras espadas comandando la general. Con nervios de acero, pues la fuga le estaba arrebatando el amarillo a Lotte Kopecky, dejó la obligación de trabajar a otros equipos, como el Canyon y UAE, en primera instancia, y posteriormente DSM y Movistar.

Consciente de su gran potencial, SD Worx dio orden de batalla cuando lo creyó más oportuno y, a partir de ese momento, puso al pelotón en fila de a uno, haciendo sufrir a más de una rival que no estuvo a la altura. Para defender su privilegiada posición fue la propia líder quien se encargó de la primera línea del frente, atacando a 24 kilómetros -lo intentó con anterioridad-, cuando la carretera se puso más escarpada, con dos cotas por franquear y la exigente rampa final como guinda.

VARIOS DEMARRAJES

En varias ocasiones demarró la corredora flamenca para abrir un pequeño hueco sobre el grupo de las favoritas, defendiéndose mejor de lo previsto para una clasicómana como ella, fructificando su esfuerzo en conservar el maillot amarillo. Además, sirvió de puente para una posterior arrancada de Vollering, intento que no pudo ver materializado la neerlandesa, al no permitírselo Van Vleuten.

A esas alturas, Kastelijn ya había dejado atrás a todas sus compañeras de aventura, demostrándose como la más fuerte con la llegada de las cotas que iban a decidir el triunfo parcial de la etapa y también la lucha entre las favoritas. En Lavernhe, último obstáculo montañoso, Sheila Gutiérrez realizó un trabajo fantástico para Van Vleuten, primero acelerando el ritmo, después cazando a Kopecky y finalmente tirando de la maillot arcoíris cuando volvió a atacar Vollering, siguiendo a la riojana a duras penas.

Un signo de debilidad que acabaría haciéndose más palpable en la rampa de medio kilómetro previa a la meta de Rodez, donde la campeona mundial aún tuvo arrestos para atacar, pero fue correspondida con mayor solvencia por una Vollering que le sacó ocho segundos y también ejerciendo cierto golpe psicológico sobre la neerlandesa.