K.L.
DONOSTIA
«MI SOLEDAD TIENE ALAS»

Crónicas de una barriada en clave quinqui

La primera película como director del actor Mario Casas apuesta por ser un homenaje al llamado “cine quinqui” que tanto interés suscitó en los años 80. “Mi soledad tiene alas” está ambientada en la Barcelona de la actualidad y el rol protagonista recae en el hermano del propio director, Óscar Casas.

La trama gira en torno a un grupo de chavales que se dedican a robar joyerías hasta que algo se tuerce y se ven en la obligación de trasladarse a una barriada de Madrid.

Casas coescribió la historia junto a Déborah François, actriz y guionista belga, durante el confinamiento de 2020.

El actor ha explicado que buena parte de las situaciones forman parte de su propia infancia en Martorell y Esparraguer, así como que el graffiti también tiene un gran peso en la cinta debido a que es el medio de expresión del que se sirve el protagonista para mostrar su telúrico mundo interior. Según ha revelado el director, «ha sido un proceso largo que nos ha llevado más de un año, pero a la vez ha sido precioso. Lo más importante para mí, y que se convirtió en casi una necesidad, era encontrar a jóvenes no profesionales que le diesen una verdad única y especial al sentido que encierra la película».