Ander OKAMIKA
Corredor del Burgos-BH

Llegó la montaña

La segunda etapa se hizo muy dura por la climatología y se ha notado en las piernas en la primera de montaña, que no ha desfraudado. Desde el principio ha habido mucha batalla para hacerse la fuga. Teníamos la duda de que pudiera ser consentida porque todo el día pegaba viento de cara, pero se ha luchado hasta formarse en el kilómetro 40. Hemos metido a José Manuel Díaz con gente muy buena, que ha cabalgado mucho, y por detrás todo el día se fue muy rápido.

Una vez llegar a Andorra en el encadenado de Ordino y Arinsal, desde el principio los equipos más potentes han puesto un ritmo muy duro y, en mi caso, en Ordino he tenido que levantar el pie porque la marcha era asfixiante. Se veía que los favoritos a jugarse la Vuelta querían disputar la etapa y prefería guardar fuerzas porque quedan muchas etapas por delante.

En la de Barcelona intenté estar adelante. No parecía tan dura, pero todo el día se fue muy rápido con mucho estrés por las caídas y nos comunicaron que a falta de nueve kilómetros se tomarían los tiempos de la general y que en el circuito final nos dejarían disputar a los que queríamos. Para ser el primer día me encontré bastante fuerte, al entrar en el circuito final intenté colocarme bien, pero mucha gente de la general se abrió, hubo unos huecos que no pudimos cerrar bien y no pude entrar en el primer grupo, aunque sí acabar en un puesto delantero.