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Rechazo al ataque policial por mostrar la ikurriña en Lizarra

Una concentración denunció ayer en Lizarra la agresión sufrida por la edil de EH Bildu Elisabet Ziordia por parte del jefe de la Policía Municipal, Rodrigo García de Galdiano, en el txupinazo.

Concentración frente al Ayuntamiento de Lizarra.
Concentración frente al Ayuntamiento de Lizarra. (Aitor KARASATORRE | FOKU)

Una concentración convocada por EH Bildu denunció ayer en Lizarra la agresión que sufrió la edil Elisabet Ziordia por parte del jefe de la Policía Municipal, Rodrigo García de Galdiano, durante el txupinazo que dio inicio a las fiestas de la localidad navarra el pasado mes de agosto. Esta cuestión también se trató en el pleno municipal, donde EH Bildu, Geroa Bai y Contigo-Zurekin pidieron explicaciones a la alcaldesa, Marta Ruiz de Alda (UPN), quien respondió que el agente «utilizó la fuerza mínima».

En el pleno, EH Bildu, Geroa Bai y Contigo-Zurekin presentaron una declaración institucional consensuada para denunciar los hechos sucedidos el 4 de agosto. En ella, apuntan que cuando la concejala Elisabet Ziordia mostró la ikurriña desde el balcón consistorial no tenía intención de «posarla ni colocarla».

Sin embargo, el jefe de la policía municipal, Rodrigo García de Galdiano, «realizó una actuación totalmente desproporcionada», rechazada por los concejales que firman la declaración, quienes abundaron en la cuestión: «En primer lugar, sin previa comunicación ni notificación alguna la agarró del cuello por la espalda y, en segundo lugar, la agarró del pecho realizando mucha presión en las costillas».

Después de este suceso, la concejala acudió al centro de salud de la localidad y derivó el parte médico a los Juzgados de Lizarra.

EH Bildu, Geroa Bai y Contigo-Zurekin concluyeron que «por no existir comunicación alguna, no pudo haber ningún tipo de resistencia» por parte de Ziordia, que la actuación del jefe de la Policía Municipal «fue totalmente desproporcionada y que actuó fuera de lo que de una persona de ese cargo se espera» y que, «según la ley de policías, su deber en todo momento debe ser proteger a la representante municipal de cualquier agresión».

Por todo ello, reclamaron a la alcaldesa que reprobara la actitud de García de Galdiano y abra expediente para aclarar las responsabilidades que pudiera conllevar. Además, le pidieron las explicaciones sobre los hechos y que justificara si la orden que ella dio al policía fue la de que actuase «con esa desproporcionalidad».

La alcaldesa, sin embargo, defendió la actuación del jefe de Policía al tiempo que denunció la «provocación» de la concejala de EH Bildu. Según confirmaron a GARA fuentes del Consistorio, Ruiz de Alda aseguró que el agente «utilizó la fuerza mínima».

¿AGRESIÓN POR UNA BANDERA?

Antes de aprobarse la declaración conjunta, EH Bildu ya había calificado de «agresión desproporcionada» la actuación policial y recordó que «a un funcionario público se le debe exigir proporcionalidad». En este sentido, preguntó si «la exhibición de una bandera exige una intervención con un grado de violencia capaz de provocar lesiones».