M. DÍAZ-A. INTXUSTA
IRUÑEA

EH Bildu liderará la FNMC por primera vez, con 755 votos frente a 443 de UPN

Xabier Alkuaz, alcalde de Tafalla, logró ayer la presidencia de la Federación Navarra de Municipios y Concejos. Es la primera vez que EH Bildu logra presidir esta institución y lo consiguió, además, con los votos de los ayuntamientos del PSN que movió ayer una de las líneas rojas que se había autoimpuesto. El derrotado fue Alejandro Toquero, alcalde de Tutera por UPN.

Xabier Alkuaz, tras conocerse el resultado de la votación.
Xabier Alkuaz, tras conocerse el resultado de la votación. (Iñigo URIZ | FOKU)

La ventaja alcanzada por el alcalde de Tafalla frente al de Tutera en la primera votación de la FNMC hizo que los alcaldes navarros por aclamación decidieran no votar de nuevo. Alejandro Toquero, el derrotado, también lo admitió así. Xabier Alkuaz salió, por tanto, elegido con 755 votos favorables, frente a los 443 de Toquero y los 40 de la alcaldesa de Barañain (de UPN, como Toquero).

Entre los apoyos de Alkuaz se encontraba el centenar de votos de los ayuntamientos del PSN. Echar cuentas exactas en la FNMC es complicado, pues son 272 municipios y concejos y, además, el voto de cada uno es ponderado.

El portavoz del PSN, Ramón Alzórriz, escudó su voto favorable en la necesidad de parar a Toquero «porque representa un proyecto antagónico al resto». Sin embargo, se trató de algo mucho más profundo. La diferencia entre Alkuaz y Toquero fue tan amplia que al PSN le hubiera bastado la abstención, e incluso había posibilidad de una segunda votación y otras cábalas. El PSN prefirió ser claro y votar sí.

El paso adelante del PSN es significativo. Hasta la fecha, los de María Chivite aseguraban que EH Bildu no estaba lo suficientemente preparado para una serie de cargos de representatividad institucional.

Es cierto, sin embargo, que la postura del PSN en la Federación de Municipios era particularmente débil con un centenar de votos de los 1.547 posibles. El partido con más apoyo de inicio era UPN, con cerca de 350 gracias a tener las alcaldías de grandes poblaciones, como Iruñea, Barañain. y Tutera. EH Bildu tiene más alcaldes, pero las localidades son más pequeñas, lo que le hacía arrancar en el entorno de los 300 votos.

Las candidaturas independientes, con más de 600 votos, marcaron la diferencia, al pronunciarse de forma muy mayoritaria en favor del tafallés.

Alkuaz fue el primero en intervenir, con un discurso muy formal centrado en la despoblación, el desarrollo económico equitativo y la adecuada financiación local. Usando euskara y castellano, el economista defendió como una de sus prioridades fomentar la participación ciudadana, así como la defensa de los derechos lingüísticos.

Toquero fue más mitinero en su intervención. Alabó la gestión municipal en pandemia y la puso por encima de la del Gobierno de Nafarroa y la del Estado. Además cargó contra los «malabares políticos» que intuía se habían urdido antes de la votación.

El tudelano definió el TAV y el Canal de Navarra «como el auténtico progreso» y reclamó una gestión «apolítica» para los ayuntamientos. «Si me dáis vuestro voto, trabajaremos por una Navarra donde ningún pueblo se quede atrás», prometió, sin suerte.

La sorpresa la dio la alcaldesa de Barañain, María Lecumberri, de UPN. Se trató de una jugada hábil que le salió bien. El partido apostó por una división de voto dado que, al haber tres candidatos para tres puestos (presidencia y dos vicepresidencias), a Lecumberri le bastaba un único voto para resultar elegida. Finalmente, recibió 40 a causa del voto ponderado.

Así, Alkuaz se convirtió de forma automática en el presidente de la FNMC, pero tendrá que lidiar con dos vicepresidentes (Toquero y Lecumberri) de una ideología opuesta. A pesar de ello, la FNMC es una entidad colegiada y donde se toman las decisiones es en la Comisión Ejecutiva. EH Bildu se preocupó de garantizarse la mayoría en esta comisión y había hablado previamente con el PSN para garantizarle presencia. De ahí, también, el compromiso de un voto favorable socialista.

Los alcaldes de Geroa Bai, por su parte, también confirmaron haber apoyado al candidato de EH Bildu. Deslizaron, eso sí, que se habrían visto más cómodos con un candidato independiente, como el que dejó ayer el cargo.

El hasta ahora presidente de la FNMC, Juan Carlos Castillo, alcalde de Azkoien por la candidatura independiente de izquierdas UPEI, había manifestado que no se presentaba por motivos personales.

La claridad de la votación puede llevar a equívoco. Nadie estaba tranquilo. Había muchos nervios debido a la dificultad de prever los apoyos de los independientes y posibles negociaciones paralelas.

En lo ya anecdótico, llamó la atención que la alcaldesa de Iruñea, Cristina Ibarrola, y Toquero mantuvieran distancia física durante todo el evento. En particular, cuando es obvio que la pelea para la sucesión en UPN está abierta y ellos asoman como los dos aspirantes con más posibilidades.

EH BILDU Y EL PSN

En la constitución de todas las instituciones, EH Bildu defendió que la fuerza con más representación del llamado bloque progresista es la que debe liderar la articulación de una mayoría para descabalgar a la derecha. Sin embargo, esto no se produjo en la constitución de los ayuntamientos, donde la posición del PSN de no votar a EH Bildu, permitió a UPN gobernar ayuntamientos referenciales como Iruñea, Eguesibar, Barañain y Lizarra.

A la hora de constituir el Gobierno navarro, EH Bildu respetó este criterio, permitiendo la reelección de María Chivite, pese a que desde el PSN, fuerza más votada del denominado bloque progresista, se hizo alarde de no negociar con la formación soberanista.

El criterio del liderazgo de la fuerza más votada no se respetó estrictamente en la constitución de la dirección de la Mancomunidad de Iruñerria, donde EH Bildu tenía esta posición, pero cedió la presidencia al independiente David Campion, que ya ocupó este cargo la pasada legislatura.

En cualquier caso, el cambio de posición del PSN a la hora de alcanzar acuerdos con EH Bildu puede suponer el inicio de una nueva fase política.